El pequeño estaba acompañado por otros críos cuando cayó al agua de cuerpo entero.
Tras ser rescatado, mantuvo durante un tiempo el conocimiento. Un testigo dijo que gritaba de dolor hasta que perdió el conocimiento al ser trasladado en helicóptero a un centro médico.
Con respiración asistida, el niño se recupera ahora de sus graves quemaduras en el hospital de Middlemore en Auckland