A raíz la propuesta expuesta desde la Fiscalía General del Estado de instalar cámaras permanentes en las aulas de los centros educativos para prevenir los abusos sexuales a menores, los cuales han aumentado considerablemente en los últimos años, han surgido numerosas voces en contra y a favor de la propuesta.
Desde la ministra de Educación, Isabel Celaá, a los sindicatos de profesores se muestran contrarios a la medida, pero muchos padres lo ven como una buena medida para que sus hijos estén más protegidos.