Un feligrés de la parroquia de la Virgen de la Paloma, David Santos Muñoz, electricista de 35 años, ha fallecido como consecuencia de la explosión en el edificio ubicado en la calle Toledo, número 98, en Madrid, donde había acudido a "echar una mano".
"Hay un sacerdote grave y entre los fallecidos se encuentra David Santos Muñoz, electricista de 35 años, padre de cuatro niños, y feligrés de la parroquia que había ido a echar una mano", informa el Arzobispado de Madrid. David era miembro de la comunidad del Camino Neocatecumenal, había acudido a petición de los sacerdotes a revisar la caldera, que funcionaba mal desde hace días. Durante horas se le dio por desaparecido.
David Santos Muñoz era el laico que se encontraba desaparecido al principio de la tarde y finalmente, se ha confirmado su fallecimiento.
Por su parte, el párroco, Gabriel Benedicto, y el sacerdote Alejandro Aravena se encuentran bien, mientras que un tercero, el joven Rubén Pérez de Ayala, ha sido trasladado al hospital en estado "grave, con quemaduras", según señala el Arzobispado.
La fuerte explosión se ha producido en torno a las 15.00 horas de este miércoles por una posible fuga de gas en un edificio perteneciente a la parroquia de la Virgen de la Paloma y San Pedro el Real, donde viven los sacerdotes. Como consecuencia de la deflagración, tres personas han fallecido y 11 personas han resultado heridas.
Según las fuentes de Emergencias, hay 11 heridos. Uno de ellos es uno de los sacerdotes, Rubén Pérez de Ayala, que ha sido trasladado al hospital con quemaduras de carácter grave, según el propio Arzobispado. Otras tres personas han sido derivadas a otros centros hospitalarios con lesiones menos graves.
La explosión, descrita como "brutal" por los testigos presenciales y que ha causado el derrumbe de parte del edificio, ha afectado a al menos cuatro plantas del centro parroquial de la Iglesia de la Virgen de la Paloma, en el que hay despachos, un centro de acogida de Cáritas, que estaba cerrado en ese momento, ocho salas de reuniones, un salón y tres viviendas para sacerdotes.
A causa de la explosión han sido evacuados varios inmuebles colindantes, entre ellos el colegio La Salle La Paloma, situado a espaldas del lugar del siniestro, y el geriátrico Los Nogales La Paloma, ubicado en el edificio contiguo al parroquial y cuyos 56 residentes han sido trasladados a otros centros de la cadena.
Algunos de esos residentes están contagiados por Covid, pero tanto el alcalde como la Policía aseguran que su desalojo y traslado se ha realizado con las debidas medidas de seguridad.
El Samur Social también ha trasladado a seis personas de tres familias del edificio colindante que ha resultado afectado y que hoy pasarán la noche en recursos municipales a la espera de que se les comunique si pueden volver o no a sus casas.
La nieve que tantos problemas ha causado en Madrid durante los últimos días ha ayudado al "milagro" de que ningún niño haya resultado herido, según ha explicado a Efe Carlos Ruiz, padre de Jimena, una alumna del colegio.