Sabíamos que Mr. Potato usa gafas, sabíamos que la patata es buena para desempañar sus cristales, pero lo que Paula Payan, una joven gaditana, no sabía, es que la relación más íntima entre las patatas y las gafas, estaba a punto de desvelársele, en toda su extensión.

Resulta que su madre había comprado una bolsa esa misma mañana en un supermercado, resulta que llegada la noche le apeteció una patata frita -también conocida como patata americana que se come sin gana- y se dispuso a abrir la bolsa. Y allí, ante la vista cansada de la madre de Paula, había algo que parecían unas gafas. No las abrió.

"Paula, me iba a comer estas patatas, ¿pero esto no son unas gafas?”, cuenta Paula que le dijo su madre. Y Paula, que tiene mejor vista, y no necesita gafas, se quedó contemplando la bolsa, pensando aquello de "¿A quién va usted a creer, a mí o a sus propios ojos?".

"Fue super raro ver las gafas dentro del paquete", ríe Paula. "Te puedes hacer una idea. Nos empezamos a reír todos. Era tan increíble que tuve el pensamiento de abrir la bolsa para verlas bien. Es la primera vez que veo un objeto dentro de una bolsa, y más raro aún unas gafas".

Tan raro, tan increíble, que la reacción de Paula fue inmediata, Fotografiar desde todos los ángulos el hallazgo y abrir hilo en twitter.

"Me dije: esto es digno de subirlo", explica Paula. "Así que hice las fotos, lo subí a los grupos y ahí está ahora mismo. Pensaba que como mucho conseguiría 200 `me gusta´, pero es la primera vez que tengo un tweet tan famoso, como se dice".

Lo publicó anoche, y esta mañana la extraordinaria historia ya le gustaba a más de 20.000 personas. Tan extraordinaria que algunos le preguntan a Paula si es un `fake´.

"Alguna gente me dice: seguro que te lo has inventado para hacerte viral", dice. "Yo les contesto que no, que si tuviera ideas tan buenas para hacerlas virales, lo estaría haciendo todos los días".

De que no lo es, de que unas gafas acabaron en esa bolsa, da fe el hecho de que la empresa fabricante se haya puesto en contacto con Paula, mediante un mensaje en la red social.

"Me han dicho, tras disculparse, que ahora ya sé porque las patatas están tan buenas", aclara Paula. "Porque tienen un duende, y a ti te ha tocado el pequeño Manolito. Lo sabemos porque es el único que lleva gafas".

Una respuesta que incluye la promesa de enviarle a Paula una foto de Manolito junto con un lote de productos. Paula asegura que dado que las gafas no representaron un peligro, y que se han reído tanto con lo sucedido, lo dejara correr como una anécdota.

"Yo les he contestado que nos da pena Manolito, que tengo sus gafas y que quiero dárselas"