De diseñar lo último en tecnología para todo el mundo a escolarizar a sus hijos en un entorno apartado por completo de pantallas y dispositivos electrónicos hasta su adolescencia. Así lo vienen haciendo desde hace años los creadores de las principales compañías de Silicon Valley, en Estados Unidos, en el corazón tecnológico del planeta.
Esta metodología se denomina pedagogía Waldorf. Con este sistema los pequeños deben tocar, hacer, crear, pensar e imaginar exclusivamente por ellos mismos, para no limitar, aseguran, sus habilidades manuales, ni su capacidad creativa, de concentración, ni de memoria, entre otras. A unas edades tempranas en las que, como muchos expertos afirman, sus cerebros no están preparados para procesar el bombardeo de imágenes, ni las herramientas virtuales, porque pueden llegar a mermar su aprendizaje.
Este tipo de enseñanza centenaria que se aplica ya en más de 90 países, también en España, con más de 70 centros adscritos. Educación 'offline' hasta secundaria, sin tecnología, que también debe tener su espejo en casa.