Novedades en el caso del narcosubmarino que transportaba tres toneladas de cocaína hasta Galicia. En el registro, los agentes han localizado 25 kilos más de droga, oculta en el casco de la embarcación. Ya son seis los detenidos. Tres de ellos, presuntos miembros de un clan gallego.
Los últimos detenidos del narcosubmarino incautado la semana pasada en la costa gallega están ya en prisión. Agustín, gallego, es el tercer tripulante del submarino que consiguió burlar el cerco policial y se ocultó varios días vestido aun con el neopreno. Sus dos compinches esperaban en tierra para dar apoyo logístico tras el desembarco de la droga. Pero no se pudo hacer porque la costa estaba tomada por la Guardia Civil y la Policía.
Los narcos decidieron hundir el submarino y abortar la operación. Dos de los tres tripulantes, de origen ecuatoriano, no tuvieron tiempo de escapar y casi fueron sacados del agua. También están en prisión.
Se trata de la mayor operación contra el tráfico de cocaína de los últimos años. Se incautaron tres toneladas en fardos y otros 25 kilos han sido hallados después en el interior del casco del submarino.
El registro está siendo muy minucioso porque buscan huellas que ayuden a cerrar el círculo. Lo que sorprende a los investigadores es la fabricación, totalmente artesanal a partir del casco de un barco. Un trabajo de filigrana, valorado en dos millones y medio de euros que podía haber transportado hasta cinco toneladas.
El submarino iba a ser de un solo uso. Un plan nunca visto. Hundir la embarcación después de trasladar la droga a un barco. El encargado de recoger la cocaína es el sexto miembro de la banda detenido en Valencia en las últimas horas.