Los colores de los distintivos ambientales de la DGT, que sigue siendo voluntario poner a nivel nacional, no son muy discretos, de hecho, son muy llamativos. Una pegatina azul, verde o amarilla puede no 'pegar' con tu coche, y más, si este es de un color llamativo. Hay un truco para poder cumplir la ley y evitar que tu coche nuevo no pinte todo lo bien que debería, según Diario Motor.
Es importante saber que estas pegatinas hay que ponerlas en un lugar que no impida la visibilidad, ya que, sino nos podrían multar. Lo primero que debemos hacer con el distintivo es plastificarlo. Solo hay que plastificar la parte adhesiva del distintivo, aunque se puede hacer por ambas caras también.
Por ahora, solo es necesario tener puesto el distintivo en el centro de Madrid, cuando se activen los escenarios preestablecidos por alta contaminación. Por lo que cuando no estés por esa zona, no es necesario ponerlo.
Por ello, cuando vayas al centro de Madrid, usa trozos de celo o cinta adhesiva y pega así el distintivo en la esquina inferior izquierda del parabrisas, ya que es un lugar que no molesta a la visibilidad. Así, cuando salgas de las zonas en las que se necesita la pegatina ambiental, podrás quitarla y así la estética de tu coche no se verá afectada. Aunque debes asegurarte que la cinta adhesiva que usas es resistente y no deja marcas.
Los ayuntamiento tienen permiso, concedido por la DGT, para regular la circulación y el estacionamiento en función del distintivo, como ya hace el Ayuntamiento de Madrid en algunos escenarios por contaminación. Los residentes podrán acceden al centro de la ciudad solo con un vehículo con distintivo, mientras que los que no residan allí necesitan de un coche con etiqueta ECO o cero. Esto ha producido que las etiquetas se agoten en las oficinas de Correos de Madrid.