En 2018, 255.531 hombres se acogieron a la baja por paternidad. Estas cifras suponen que al día, de media, 700 padres pidieron el permiso correspondiente por el nacimiento de un hijo. Con estas cifras en la mano, el nuevo retraso de tres semanas de la ampliación del permiso para los trabajadores 14.700 padres se verán perjudicados.
Hoy la ministra de Igualdad, Carmen Calvo, ha explicado que aunque el decreto se ha publicado hoy en el BOE, la ampliación de cinco a ocho semanas no será efectiva hasta el 1 de abril para dar tiempo a las empresas a adaptarse.
Junto a los 14.700 perjudicados por el nuevo retraso de tres semanas, hay que sumar 4.900 afectados más por el primer retraso, del 1 al 8 de marzo. En total desde que el Ejecutivo anunció el Real Decreto Ley Real Decreto de medidas urgentes para garantizar la igualdad entre mujeres y hombres en el empleo, 19.600 hombres se han quedado con la miel en los labios.
El alcalde de Cádiz, José María González Kichi, y la líder de Podemos en Andalucía, Teresa Rodríguez, que ayer tuvieron a su primera hija, Aurora.
El Real Decreto amplía este año la baja para los padres de cinco a ocho semanas, el año que viene a 12 y en 2021 será igual que el de las madres, de 16. "En tres años estaremos alcanzando la media de permisos de paternidad y maternidad que tienen los países de la Unión Europea que ya han hecho su trabajo en materia de corresponsabilidad e igualdad", ha remarcado Calvo.
Las bajas de paternidad el año pasado costaron, según datos del Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social costaron 448.706.703 euros. Hasta julio de 2018 fueron de cuatro semanas, a partir de esa fecha se ampliaron a cinco.
El coste de la ampliación de la baja a ocho semanas se estimaba en los fallidos Presupuestos Generales del Estado de 2019 en 302 millones de euros. El Ministerio de Trabajo, Migraciones y Asuntos Sociales ha estimado ahora el gasto total en 2019 en paternidad previsto en 775 millones de euros, un incremento respecto del Presupuesto de 2018 de 252 millones de euros, provocado por la ampliación a 8 semanas. La ampliación a 12 semanas supondrá en torno a 705 millones al año y a 16 semanas, 1.107 millones de euros.
El coste corre a cargo de la Seguridad Social, prevé recaudar más gracias a los mayores ingresos derivados del alza del Salario Mínimo y el aumento de la cotización máxima.