El director del Centro de Coordinación de Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad, Fernando Simón, ha celebrado la “fase de transición” en la que ya nos encontramos con unas cifras “muy buenas” de la evolución de la pandemia. No obstante, ha reconocido que la aparición de rebrotes de coronavirus
Cabe recordar, que el domingo se han registrado 164 muertos, lo que eleva la cifra total de fallecidos a 25 264. Además, 838 personas han dado positivo en el test de PCR en las últimas 24 horas por lo que el total de contagiados ascendería a 217 466.
"Es una noticia muy buena, dentro de la tristeza que es siempre habar de muertes. Es una cifra muy buena que se tiene que consolidar en los próximos días", ha valorado.
"España es el país que incrementa menos el número de casos entre los siete países más afectados de Europa", ha dicho a la vez que ha pedido una vez más precaución con los datos al tratarse de un fin de semana largo.
"Estamos en fase de transición en España, al pasar a la fase 0 y a la 1 determinadas islas. Es un paso pequeño pero importante hacia esa transición para la nueva normalidad para valorar nuevos rebrotes u olas epidémicas en otoño", ha explicado.
Preguntado por la prensa por el descuadre de cifras de contagios en Madrid con los hospitalizados, ha justificado que “Madrid ha hecho un esfuerzo importante para conseguir series más limpias de datos, pero no se ha terminado. Los hospitalizados pueden corresponder a personas que han empeorado desde casos leves” y, ha agregado que “las modificaciones no van a afectar solo a Madrid”.
Sobre si la peor calidad del aire afecta al aumento de los contagios, ha reconocido que “hay estudios que relacionan la calidad del aire y la enfermedad, el clima con la transmisión”, pero que estos no se han hecho con el COVID-19.
Por otro lado, ha lamentado la alta probabilidad de nuevos rebrotes: “Sabemos que es algo que puede pasar con mucha probabilidad”. No obstante, espera que “sean pequeños, se atajen rápido y si hay una segunda onda epidémica no alcance la misma magnitud”.
Preguntado por si vamos o no muy rápido en esta fase de desconfinamiento, Simón ha considerado que “la duda de ir rápido siempre estará, al igual que lo contrario”. “Vamos a las casi ocho semanas de desconfinamiento, que han tenido un impacto radical sobre la transmisión. Solo se está dando en núcleos pequeños y reducidos, potencialmente controlables: instituciones sanitarias, residencias... La transmisión en núcleos familiares se debe haber reducido igualmente a niveles muy bajos. De momento el aumento de movilidad marginal no se está reflejando en un aumento de casos, no podemos asegurar que no vaya a verse en los próximos días, pero el impacto de la actitud responsable de cada persona se está viendo más de los que preveíamos. La duda de si vamos muy rápido siempre va a estar, pero también la duda de si estamos yendo muy despacio, por el impacto económico que está teniendo. Hay que valorar el riesgo de cada casa. No debe ser fácil tomar estas decisiones”, ha dicho.
Asimismo, se ha referido a la obligatoriedad de llevar mascarillas en el transporte púbico. “Hay situaciones muy concretas, de trayectos cortos, donde hay un contacto muy estrecho y no se puede mantener la distancia de seguridad”, ha explicado.
La probabilidad de que haya una inmunidad de grupo es "muy baja", ha dicho. Por lo que considera un "error" que basemos la protección en esto: "Va a ser difícil que tengamos una inmunidad rebaño suficientemente alta en los próximos meses” ya que “necesitamos entre un 67 y un 70 por ciento de personas que hayan estado infectadas en este periodo para saber que estamos protegidos”. No obstante, confía en que con los estudios de seroprevalencia tendremos más información para saber cuántas personas puede tener un cierto grado de inmunidad.