Bradley Button era uno de los pasajeros del vuelo que partía desde Nueva Zelanda hacia Australia. En el momento de degustar su comida durante el viaje, se llevó una gran sorpresa al descubrir que en su plato había un dente procedente de una persona.
Según ha declarado a 7 News, Button estaba comiendo arroz cuando notó un objeto duro al masticar. Tras escupirlo, descubrió que se trataba "sin duda" de un diente.
Sin embargo, la azafata que fue a atender su reclamación le aseguró que solo se trataba de una pequeña piedra, pero otro de los pasajeros confirmó que en realidad era un diente.
"La idea de tener parte del cuerpo de otra persona en mi comida no es agradable", declaró al medio.
Después de publicar la foto, la compañía Singapore Airlines le indemnizó con 55 dólares para utilizarlos en sus próximos destinos. La prensa se ha hecho eco de la noticia al tratarse de la aerolínea considerada como la mejor del mundo.