Detenido un joven por violar 3 veces a propietaria de un comercio de Mallorca
Un joven de 20 años ha sido detenido en Felanitx
Presunta violación hasta en tres ocasiones además de por el robo del dinero de la caja en cuatro ocasiones
Lo que sucedió entre agosto de 2019 y enero de este año
La Guardia Civil ha detenido en Felanitx a un joven de 20 años por la presunta violación hasta en tres ocasiones de la propietaria de un comercio de esta localidad mallorquina, además de por el robo del dinero de la caja en cuatro ocasiones, lo que sucedió entre agosto de 2019 y enero de este año, han informado a Efe fuentes de la investigación.
El arresto de este joven marroquí por agentes de la Guardia Civil ha tenido lugar este lunes y al detenido se le acusa de tres delitos de agresión sexual, de cuatro de robo con violencia e intimidación y de otro de detención ilegal.
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Agosto de 2019, la primera denuncia
La Guardia Civil lleva investigando este caso desde agosto de 2019, cuando la mujer presentó una primera denuncia por un robo con arma blanca en su comercio y una presunta primera violación, lo que se repitió en dos ocasiones más.
Para sus asaltos, el detenido llevaba la cabeza cubierta con una capucha y el rostro con una máscara sobre la boca. Para atemorizar a la víctima mostraba una navaja, con el fin de llevarse el dinero y violarla, para lo cual la conducía a la parte trasera del establecimiento.
Según las fuentes consultadas, los agentes visionaron las imágenes de las cámaras del comercio desde que se formuló la primera denuncia, pero debido a su falta de calidad no pudieron identificar al presunto agresor.
Finalmente, en enero pasado volvió a asaltar el local y, en esta ocasión, encerró a la mujer, de unos cuarenta años, en un cuarto y huyó del comercio con el dinero de la caja, pero sin agredirla sexualmente. La víctima logró ser liberada por unos clientes que escucharon los golpes y gritos de auxilio.
Gracias a que las cámaras del comercio fueron cambiadas, mejoró la calidad de las imágenes y los agentes han podido detener al presunto agresor, que escondía las ropas con las que se vestía para dar sus golpes en un descampado.