Agentes de la Policía Nacional de Segovia estaban el pasado martes de patrulla nocturna por la ciudad cuando, al pasar frente a un portal, percibieron un fuerte olor. Parecía hachís. Cuando entraron se encontraron a una persona que afirmaba no vivir allí, sino que había ido a visitar a un amigo.
En el actual estado de alarma, las reuniones sociales no están permitidas y solo se puede salir del domicilio para realizar actividades de extrema necesidad, como ir a trabajar o a comprar al supermercado. Por eso, los agentes le informaron de que iba a ser sancionado. Al llevar a cabo el cacheo de seguridad, se encontraron lo que podían ser dos trozos de hachís de unos 49 gramos. Este hecho cambió la actitud de la persona, que intentó golpear a los agentes e incluso llegó a escupirles en la cara, lo que supuso su detención.
El vecino de Segovia ha sido puesto a disposición judicial por haber, presuntamente, cometido un delito de atentado a agentes de la autoridad y la salud pública. Por la sustancia intervenida se propuso una sanción administrativa.