Un delincuente especializado en robar coches de alta gama salió de un concesionario al volante de un Aston Martin, valorado en 239.000 euros. Pero en esta ocasión, el ladrón no iba a salirse con la suya porque a la salida del concesionario del distrito de Sants-Montjuïc de Barcelona le esperaba un agente vestido de paisano.
El agente, que llevaba siguiendo al individuo sospechoso desde el barrio de la Zona Franca, entró al establecimiento junto con el ladrón y empezó a advertir a los trabajadores del concesionario cuando, de repente, un Aston Martin huía a gran velocidad.
Los Mossos empezaron a buscar al individuo tras la voz de alarma del agente. Al poco tiempo, la policía encontró el vehículo en las inmediaciones del Jardín Botánico. Allí, se encontraba el ladrón de nacionalidad española y unos 45 años. El delincuente había saltado un muro de cuatro metros para esconderse entre los árboles pero sin éxito.