Maximiliano Andrés Taborga, de 29 años, ha sido detenido en San Juan (Argentina) acusado de maltratar y prostituir a su novia, madre de un niño de tres años. Cuando se conocieron en 2013, ella tenía 19 años y trabajaba como auxiliar de guardería para mantener a su bebé.
Dos meses después de iniciar la relación, la pareja comenzó a convivir y en ese momento empezaron los golpes y los insultos para madre e hijo, como informa Los Andes. La mujer, por temor a que sus compañeras apreciaran los moretones de su piel, dejó el trabajo y quedó bajo el sometimiento de Taborga.
Los abusos fueron en aumento y, al cuarto mes, Taborga la obligó a prostituirse. El acusado ató a la chica a la cama y los clientes, los amigos del extorsionador o incluso tres hombres a la vez abusaban de ella frente a su hijo, quien se encontraba en la habitación. Taborga recibía drogas y dinero de los clientes mientras mantenía sometida a la chica bajo amenazas de muerte.
El calvario duró cuatro meses, hasta que la chica pudo escapar con su hijo por una ventana de la habitación y rápidamente fue a denunciar a Taborga a la Comisaría de la Mujer. Él fue detenido y ella fue a vivir a casa de una amiga, pero en cuanto Taborga fue excarcelado, fue a buscarla y la amenazó con matar a su hijo.
La chica huyó a Mendoza y, poco después, a Córdoba puesto que él siempre la localizaba para agredirla y amenazarla. En Córdoba lo denunció ante un juzgado federal y el caso fue considerado como trata de personas. Pese a que Taborga se negó a declarar ante el juez, aseguró que todas las acusaciones “son mentira”. De ser considerado culpable, se enfrentaría a penas de cárcel de entre ocho y 30 años.