¿Por qué algunas prendas huelen muy mal y otras no?
Cuando las temperaturas suben es inevitable sudar, pero hasta en esto del sudor existen diferencias, hay quienes lo llevan bien y quienes cantan La Traviata a su paso. Si la higiene es adecuada y partiendo de que no existen problemas de salud, el causante del mal olor de la ropa no es el sudor en general, es la combinación de ciertas bacterias con un determinado tipo de sudor aceitoso que se genera en determinadas zonas del cuerpo como las axilas.
La razón del mal olor de determinadas prendas está en el comportamiento de los tejidos con que se fabrica. Las fibras naturales absorben además de bacterias, humedad, por lo que aquellas quedan atrapadas entre las fibras y no desprenden olor. Por el contrario las sintéticas no son capaces de atrapar la humedad pero sí el sudor aceitoso, éste queda adherido a la superficie de los tejidos atrapando las bacterias causantes del mal olor.
Poliéster, el rey de los tejidos más hediondos
El rey de los malos olores es el poliéster, una fibra sintética de plástico muy resistente a la humedad, aunque en general todas las fibras sintéticas (licra, materiales térmicos y de compresión) combinadas con el sudor, generan mal olor. El problema es que este tipo de ropa, especialmente la de deporte, conserva el mal olor incluso después de lavarla, pero hay trucos que ayudan a evitarlo como mojarla antes y esparcir por encima sal de cocina. Otra opción es dejarla una noche en remojo en una mezcla de agua, vinagre, limón y bicarbonato. Evitar usar suavizante en el lavado y no tenderla al sol son otros de los remedios eficaces que ayudan a que desaparezca el mal olor.
El algodón no engaña ni retiene el mal olor
Si se parte de una premisa básica que es la higiene corporal matutina, especialmente en esta época, estamos reduciendo considerablemente los riesgos del mal olor. La segunda regla es que la ropa se debe lavar con frecuencia, si te vistes con prendas que huelen huele mal no merece la pena ni que te pongas desodorante. La tercera es que cuanto más naturales sean los tejidos menos riesgos tiene la ropa de absorber malos olores provocados por las bacterias. Así que una de las mejores alternativas para vestir en esta época del año es la ropa de algodón porque es un tejido fresco y porque no retiene el mal olor.