Desiré, la vecina de Villena, agredida por un grupo de menores de edad de su barrio, vive con miedo. Su hermana, Ramona, ha contado a Informativos Telecinco que tienen "miedo de que les hagan algo a sus hijas". La testigo ha sido amenazada y una amiga de la familia les ha avisado de que están preparando algo para venir a por vosotros".
"Tened cuidado. He escuchado por ahí que están preparando algo, va a venir a por vosotros", nos ha contado Ramona, la hermana de Desiré. La mujer, de 42 años, fue pateada y golpeada con palos y piedras por tres menores de edad vecinos suyos, que la dejaron inconsciente en el suelo. Los familiares de los agresores no hicieron nada por evitarlo.
"Los conocemos a todos", dice Ramona que asegura que los agresores pertenecen a familias problemáticas conocidas en el barrio, en la zona próxima al Castillo de la Atalaya, muy degradada en los últimos años. Tanto ella como su hermana, tienen "miedo de que le hagan algo a nuestras hijas".
Sabemos que a la testigo, que lo vio todo, la han amenazado para que retire la denuncia y le han advertido que "mejor no se presente cuando llegue el juicio".
El pasado miércoles, su sobrino le pidió a tres menores que intentaban entrar en una casa deshabitada que no lo hicieran. Discutieron pero las cosas no fueron a más hasta el día siguiente, cuenta Ramona.
El hijo de Desiré paso por la puerta de casa de su madre cuando volvía de trabajar y vio que los menores, juntos a adultos de sus familias, que iban tras él con palos. En ese momento, su madre les pidió que dejaran a su hijo y que hablaran como personas civilizadas. El hijo de Desiré se fue porque, efectivamente, su madre estaba hablando con aquellas personas.
Sin mediar palabra, cuenta Ramona, el menor de 16 años corrió hacia Desiré empujándola varios metros y dejándola inconsciente en el suelo. En ese momento, dice, los menores empezaron a darle patadas y pegarle con palos y piedras sin que ningún adulto de sus familias lo parase. "La testigo estaba dentro de casa de mi hermana, tan asustada, que no se atrevió a salir y llamó a la policía para contar lo que estaba pasando".
"Sabemos que, al menos los menores venían con ganas de bronca", lamenta la hermana de Desiré.
Desiré ha vuelto a casa pero tiene miedo. Y eso a pesar de que la policía ha echado de su vivienda al menor de 16 años, que vive muy cerca de ella y fue el más agresivo en la pelea.
La víctima, de 42 años, tiene el cráneo y el pómulo abierto. "Tardará meses en cerrarse", dice Ramona que sabe que lo más preocupante son los coágulos de sangre que tiene su hermana.
Los menores, de 16, 16 y 17 años, han pasado a disposición judicial de la Fiscalía de Menores, que es quien debe decidir que hacer con ellos hasta que se celebre un juicio.