El homicida, que se encuentra ingresado en prisión desde que fue detenido a finales de septiembre, se negó a declarar ante los Mossos d'Esquadra y el juez de Instrucción de guardia de Figueres que se hizo cargo del caso en el momento de su detención, y ahora ha solicitado voluntariamente declarar ante el juez para confesar

Según Carles Monguilod, abogado de Daniel Pierre Imandt, de 40 años, su cliente ha reconocido los hechos y ha explicado que la madrugada del 26 de setiembre discutió con Sabrina, que había ido a recoger sus cosas, y que esta pelea verbal acabó en agresión física.

Según este relato, la mujer cogió un cuchillo y él cogió otro y la apuñaló durante la pelea, que habría tenido como móvil los celos, como en otras ocasiones.

El abogado de la defensa ha apuntado que en estas circunstancias se entiende que se está delante de un delito de homicidio y no de asesinato, porqué no tenía intención de matar.

"Creo que tenemos argumentos sólidos para hablar no de asesinato, sino de homicidio y de ver si hay atenuantes, podría haber legítima defensa incompleta quizás, un estado de obcecación, la pelea es determinante para lo que pasó finalmente", ha indicado Monguilod.

El acusado también ha detallado ante el juez que a pesar de que la muerte de la mujer se produjo de madrugada, no fue hasta la tarde de ese mismo día cuando la descuartizó y que la metió en unas 5 bolsas de plástico que escondió en el congelador de su chalet del camino del Joncar, de Sant Pere Pescador.

Ante el juez, el homicida confeso ha asegurado que no sabía porqué había tardado tantas horas en descuartizarla, pero si ha mantenido que lo hizo presa del pánico, en estado de shock y bajo el efecto del alcohol y de ansiolíticos.

Monguilod ha indicado que no pedirá la libertad provisional porqué se trata de un hecho muy grave, pero ha apuntado que solicitará que el juicio se haga lo antes posible.

"A pesar de que puedo solicitar la libertad provisional siempre que quiera no la pienso solicitar, entiendo que es un hecho suficientemente grave como para que se mantenga la prisión provisional, además es una persona extranjera y por lo tanto sé que no se daría", ha dicho Monguilod.

En este sentido ha explicado que "lo que intentaré es que vaya todo muy rápido para ir a juicio".

Los informes psicológicos que los peritos han hecho al acusado hasta el momento apuntan que no padece ninguna enfermedad mental, a pesar de que deberán concretar si en el momento puntual de los hechos sufrió algún tipo de alteración psíquica.

A pesar de que en un primer momento Daniel Pierre Imandt involucró en los hechos a su jardinero pakistaní, que fue quien alertó a la policía de lo sucedido, hoy ha dicho ante el juez que no tenía nada que ver.

Por su parte el jardinero ha decidido actuar como acusación particular para demostrar que él no tuvo nada que ver con el crimen y porque el hecho de que el acusado le enseñara el cuerpo troceado de la víctima le ha causado importantes secuelas que le hacen estar bajo tratamiento psiquiátrico.