Una mujer de 90 años con problemas de movilidad ha sido desahuciada este pasado jueves en el distrito de Sants en Barcelona. Los Mossos d`Esquadra habían intentado desalojar la vivienda en dos ocasiones más pero sin éxito. A la tercera fue la vencida para que la anciana que vivía de alquiler con su hija, su yerno y su nieto fueran desalojados.
“Ya pensaba que iba a tener una vejez digna y no la he tenido”, confiesa la anciana que vivía en un piso de renta antigua desde hace 35 años. El retraso de unos días en el pago del alquiler en mayo del año pasado, fue aprovechada por el propietario de la vivienda para para activar el procedimiento judicial.
“Llegó la carta, mi madre no la cogió porque tenía miedo de abrir la puerta porque estaba sola en ese momento”, explica la hija. La familia continúo pagando el alquiler hasta septiembre de 2018, cuando se enteraron de que iban a ser desahuciadas. Además, la hija asegura que el inquilino de la casa tenía pensado enviar a la familia a la calle “sí o sí” y no les dio la opción de pagar un poco más por la vivienda. Varios activistas intentaron frenar el desahucio pero finalmente la familia ha sido expulsada de su hogar.