Ya son cuatro los fallecidos en la explosión del edificio en Madrid. Rubén Pérez de Ayala, el sacerdote herido en el Hospital de La Paz, ha fallecido esta madrugada lo que eleva a cuatro el número de víctimas mortales del siniestro, han indicado a Efe fuentes sanitarias.
El sacerdote fue ingresado ayer tras la explosión en este centro sanitario con quemaduras de carácter grave. En el momento de la explosión, se encontraba junto a David Santos Muñoz revisando el estado de la caldera de gas del edificio, que llevaba un tiempo funcionando mal.
Con la muerte de este sacerdote se elevan a cuatro las víctimas del suceso, que costó la vida a tres hombres, uno de ellos David Santos, un feligrés que había acudido a arreglar la caldera.
El sacerdote recibió la extremaunción de manos de su hermano Pablo, también presbítero, según Religión Confidencial. La intervención, traumatológica, intentó reparar la pelvis que estaba completamente destrozada. Además, según las mismas fuentes, en el hospital le detectaron una mancha en el pulmón, de covid.
"Hemos preguntado qué expectativas de recuperación y nos han dicho que muy malas. Veremos en las próximas horas las noticias que nos dan", comentaban amigos cercanos. El sacerdote volvió a entrar una segunda vez en quirófano porque sangraba mucho.
"Rubén ha salido de esta segunda operación y está en la UCI muy crítico. Estas horas son vitales", explicaban los conocidos del sacerdote. Finalmente, fallecía esta pasada madrugada.
Esta mañana comenzará el derribo controlado del edificio que ayer saltaba por los aires en pleno centro de Madrid. Será una tarea delicada, que llevará días. La estructura ha quedado gravemente dañada y podría haber riesgo de derrumbe.