¿Existe una fecha histórica en la que montar el Belén de Navidad?

  • La tradición de montar el Belén de Navidad cuenta con siglos de historia, sin que exista una fecha clara para hacerlo

  • El Día de la Inmaculada Concepción o la propia Nochebuena, tras la Misa de Vigilia, son algunas fechas clave

  • Siendo estrictos, el niño Jesús no debería colocarse en el pesebre hasta su nacimiento

Todos tenemos claras las fechas clave de estas fiestas: Nochebuena, Navidad, fin de año, la llegada de los Reyes Magos... Sin embargo, cuando se trata de definir en qué momento comienza la Navidad como periodo festivo, la cosa se complica.

Para muchos, el 1 de diciembre es la fecha clave, por el simple hecho de ser el día de comienzo del mes navideño por excelencia. Para otros, toca atender al calendario religioso y ser estrictos en cuanto al momento de comenzar a celebrar. Si estás pensando en cuál es el mejor momento para colocar el decorado navideño en tu hogar, te contamos cuáles son las fechas clave para montar el portal de Belén.

¿Cuándo se monta el Belén de Navidad?

El inicio de la Navidad es algo relativamente flexible, al menos a juzgar por lo variado de nuestras prácticas. Para muchos comercios, lo mejor es colocar el decorado cuanto antes para impulsar así el consumo, aunque las jornadas del Black Friday o el Cyber Monday suelen crear una frontera infranqueable. Por eso el 1 de diciembre suele ser la fecha elegida por muchas empresas, y también por los propios ayuntamientos, que estrenan por estas fechas el alumbrado navideño.

Cosa distinta es nuestra inclinación natural y nuestras ganas de celebrar, que son flexibles y se amoldan al momento histórico. Por ejemplo, si atendemos a nuestras búsquedas de música navideña, como el clásico villancico de Mariah Carey, veremos que, si fuera por muchos, el árbol y el Belén se desempolvarían en el mes de noviembre. Más aún durante el pasado 2020, año en que las búsquedas de este clásico navideño se adelantaron varias semanas, probablemente por nuestras ganas acumuladas de socializar y compartir momentos con nuestros seres queridos.

Sin embargo, existen determinadas fechas históricas relacionadas con el inicio de la Navidad que definen estas fiestas por encima de nuestras costumbres añadidas con el tiempo. Se trata de fechas que encierran su propio significado para quienes verdaderamente celebran la Navidad atendiendo a su origen y significado religioso.

Una de ellas es el 8 de diciembre, Día de la Inmaculada Concepción. Según el Papa Pío IX, se trata de la fecha del nacimiento de la Virgen María, que "fue preservada por privilegio único de la mancha original desde el primer instante de su Concepción". La Virgen María, según el discurso religioso, estuvo libre de pecado y culpa desde su concepción hasta su muerte.

Si optamos por montar el Belén en esta fecha, hay que tener en cuenta que, siendo estrictos, el niño Jesús no debería aparecer en el pesebre hasta su nacimiento, en Nochebuena, y los Reyes de Oriente no deberían hacer su aparición hasta la noche del 5 de enero.

La realidad nos muestra que, en España, muchas familias pasan por alto esta fecha para aprovechar el puente de diciembre y montar el Belén el Día de la Constitución, que se celebra el 6 de diciembre. Sin embargo, esta fecha no tendría anclaje religioso alguno.

Otra fecha posible, acorde con la tradición, es el comienzo del Adviento, que tiene lugar cuatro domingos antes del día de Navidad. En el caso de este 2021, se trataría del 28 de noviembre, por lo que es posible que muchos ya lleguemos tarde si queremos colocar el Belén o el árbol a tiempo.

Por otro lado, hay quienes eligen el 1 de diciembre como fecha para colocar el portal de Belén y el resto de la decoración navideña, al tratarse del primer día de diciembre, el mes navideño por excelencia. Esta elección tiene mucho que ver con el calendario comercial: son muchas la empresas que optan por esta jornada para dar el pistoletazo de salida a la temporada navideña.

La fecha más límite de todas es precisamente la propia Nochebuena: se dice que antiguamente el día de Nochebuena era la jornada preferida para montar el Belén, después de la Misa de Vigilia o Misa del Gallo, que se celebra antes de la medianoche de la Nochebuena en conmemoración del nacimiento de Jesús. También se dice que antiguamente, con motivo de la Nochebuena, los pobres visitaban las casas de los ricos para poder admirar sus portales de Belén, antes de que se democratizara su uso.

Más allá de estas fechas, lo cierto es que la Navidad puede comenzar cuando queramos, al menos para quienes dejan a un lado el origen religioso de esta festividad. Y es que, más allá de su origen histórico, la Navidad se ha convertido en una celebración con personalidad propia, y lo mismo se aplica al ritual de la decoración en nuestros hogares. Prueba de ello es que, según un estudio realizado por 'The Journal of Environmental Psychology' el pasado 2020, las personas que adelantan la decoración de Navidad son más felices. Además, al tratarse de una tradición que se comparte, la felicidad se traslada al círculo cercano de la persona, contagiándose entre quienes le rodean.