Casi toda la población está cumpliendo con el confinamiento como lo piden las autoridades, pero se están dando casos cuanto menos 'curiosos' de personas irresponsables que se saltan la cuarentena por coronavirus. En Cantabria esta semana se han dado varios de ellos.
Entre los arrestos más curiosos registrados hasta ahora en la comunidad autónoma destaca el de un hombre que circulaba con un patinete por el Paseo Pereda de Santander con una caja en la que portaba un pequeño pájaro, un joven que había quedado con otros chicos para beber y tomar el sol en un parque de la ciudad, una mujer que se llevó sin pagar ocho latas de anchoas de un supermercado para "dar de comer a un hijo" pese a que no tiene ninguno, un varón por coger sin guantes y escupir la fruta a la venta, y otro por fumar en la vía pública porque "no iba con él lo de estar encerrado en casa".
Es cierto que son casos aislados y que no corresponden a un retrato realista de la realidad, sin embargo no deja de llamar la atención que, con toda la información que hay al respecto, sigan ocurriendo estos sucesos.
Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han propuesto que se sancione a 5.113 cántabros por incumplir el estado de alarma decretado para frenar el coronavirus y han detenido a 61 ciudadanos por desobedecer las medidas establecidas, a veces de forma reiterada, según datos actualizados hasta ayer viernes, 3 de abril.
De las intervenciones de la Benmértia destaca el arresto de seis jóvenes -tres de ellos menores de edad- en el centro socioeducativo juvenil de menores judicializado de Parayas por un motín al informarles de las restricciones del estado de alarma, una mujer que increpó e insultó a los agentes que pretendían identificar a su novio en Castro Urdiales y que llegó a agredir a uno de ellos, y otra que salió corriendo cuando fue requerida para ser identificada en Polanco.