El síndrome del corazón roto (cardiomiopatía de Takotsubo) se produce como resultado del estrés físico o emocional intenso. Se trata de una falta cardíaca temporal. Sus síntomas son similares a los de un ataque al corazón.
Además, los científicos han determinado que un pequeño porcentaje de quienes son diagnosticados de ataque cardíaco padecían en realidad la cardiomiopatía de Takotsubo. La diferencia radica en que, cuando hay ataque, las arterias coronarias se bloquean. En el caso del Takotsubo, la parte baja del corazón no se contrae como debería y se ensancha, hasta parecer un globo. En la mayoría de las ocasiones, la condición es tratable y curable.
Cambio de "uso"
Ahora los científicos creen que la cardiomiopatía tendría un papel en ayudar al organismo a superar las situaciones de estrés ya que el organismo reacciona produciendo adrenalina, que estimula el corazón, ayudando a distribuir más oxígeno al organismo.
El cuerpo cambiaría su respuesta a la adrenalina, que en vez de estimular el corazón reduciría su fuerza para bombear sangre. Como consecuencia, el corazón puede llegar a sufrir una falla. Pero la mayoría los afectados termina recuperándose.
En verano
Los investigadores del Imperial College probaron esta hipótesis con ratas, a las que les estimularon la condición inyectándoles adrenalina. En las ratas se observó la contracción del músculo cardíaco, del mismo modo que ocurre con los seres humanos con síndrome del "corazón roto".
Pero, a cambio, resultaron protegidas de los niveles tóxicos de adrenalina que circulaban por su organismo, por lo que los científicos concluyeron que la hormona tomó un "camino diferente" al usual.