Informativos Telecinco ha podido seguir en directo cómo se controla a los vecinos de Madrid afectados por las medidas de restricción aplicadas por el Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso con propósito de intentar frenar el incremento de los contagios de coronavirus.
Sobre las calles, un amplio dispositivo policial ha sido dispuesto sobre las áreas afectadas por las restricciones de movilidad, como Orcasitas, recientemente adherida a las 45 zonas básicas en las que se han impuesto limitaciones.
A la hora de ir al trabajo, han sido muchos los que se han encontrado a los agentes en puntos clave, como estaciones de transporte público o los accesos a algunos de los parques más concurridos del lugar, donde se ha desplegado incluso a la caballería para controlar el tránsito.
Desconcertados, algunos siguen sumidos en la incertidumbre de unas medidas que no dejan de generar controversia entre quienes las consideran confusas y quienes denuncian que son desiguales e injustas.
Muchos han sido los que al salir por la mañana no estaban preparados para el control policial, sin la autorización pertinente para poder salir de su área restringida. Algunos, incluso, han tenido que llamar por teléfono, y con el agente al lado e interviniendo en la llamada, para comunicar a su empleador que necesitan de forma inmediata un justificante para poder acudir al puesto de trabajo; una situación que se ha repetido en distintos puntos.
Además, en algunos casos los agentes realizan también tareas de comprobación para evitar la picaresca y asegurarse de que, efectivamente, la persona a la cual realizan un control va a llevar a cabo la actividad –teóricamente justificada– que dice estar realizando o ir a realizar.
La situación en Madrid, donde hoy han arrancado los test de antígenos a la zona con mayor incidencia, --Puente de Vallecas--, continúa siendo sumamente preocupante y las cifras continúan en incremento: en las últimas 24 horas se han registrado 2.917 casos y 46 fallecidos, según los datos del propio Ejecutivo regional.
Mientras, desde el Gobierno advierten de que son necesarias medidas más drásticas que las que se están aplicando, y desde el Ministerio de Sanidad se exige que se cumplan con las recomendaciones: “restricción de movilidad a todos aquellos municipios con incidencia acumulada igual o superior a 500 casos por 100.000 habitantes, limitar la movilidad a lo estrictamente necesario y para toda la comunidad prohibir el consumo en barra de bar y reducir aforos de las terrazas al 50%”.
Según recalcó Salvador Illa durante su comparecencia en Moncloa, en Madrid hay “transmisión comunitaria” y “sin control”, por lo que desde el Ejecutivo presidido por Pedro Sánchez se sigue instando por activa y por pasiva a que la presidenta autonómica, Isabel Díaz Ayuso, “se deje ayudar y escuche”, y “que vea los datos como son”.
La situación epidemiológica, insisten, “no está bajo control”, y por eso, mientras prosiguen las reuniones entre Gobierno central y regional, Illa advierte que si no se aplican las recomendaciones “habrá que tomar decisiones mucho más duras” porque, además, “ya vamos tarde”.
No obstante, el ministro confiere a las autoridades sanitarias de Madrid la responsabilidad de tomar el control, justificando la decisión en que aún están en un “escenario de cooperación reforzado” y por “lealtad institucional”.