Sanidad confirma un fallecido el 13 de febrero que dio positivo por coronavirus

El coronavirus continúa avanzando en España, que ya registra más de 150 casos confirmados al tiempo en que se ha registrado el primer fallecimiento con presencia del temido Covid-19.

Concretamente, ha sido la consejera de Sanidad Universal y Salud Pública de la Comunidad Valenciana, Ana Barceló, quien ha confirmado en una rueda de prensa que un hombre que falleció el 13 de febrero en el Arnau de Vilanova, en Valencia, dio positivo por coronavirus después de que se le practicase una necropsia.

Tal como ha explicado Barceló, debido al cambio de los criterios de definición de caso en el protocolo que realizó el Ministerio de Sanidad el pasado 27 de febrero, decidieron “ir más allá y realizar una investigación retrospectiva de aquellas muestras que, por otros motivos clínicos, se recogieron en pacientes fallecidos sin causa filiada”. De ese modo, en esa investigación, “a través de la necropsia realizada a las muestras tomadas de este paciente”, detectaron el positivo por coronavirus.

No obstante, como ha matizado la consejera y como ha dejado claro la Consellería de Sanidad Universal y Salud Pública de la Comunidad Valenciana a través de una nota de prensa, “no se puede determinar que la causa de la muerte ocurrida el 13 de febrero haya sido el coronavirus”.

En este sentido, refieren que “por la fecha del fallecimiento, el periodo de incubación de la enfermedad relacionada con este caso ya habría superado los 14 días”, aunque, tal como precisan, seguirán realizando una “estrecha vigilancia” sobre el hospital en el que falleció, el Arnau de Vilanova.

Mientras tanto, la propagación del virus continúa en nuestro país, donde los focos que más siguen preocupando se centran en Madrid y en Vitoria.

En la capital de España, tras doblar prácticamente el número de casos en un día, ya son más de 50 los positivos confirmados y se ha registrado el primer caso de coronavirus en un centro educativo después de que se haya conocido el contagio de un profesor que había viajado a Italia. Más allá, inquietan, sobre todo, los contagios “locales”, sin origen conocido, que se han producido en la comunidad.

En Vitoria, por su parte, todas las miradas se centran en el Hospital de Txagorritxu. Lo que era uno de los centros de referencia para combatir la enfermedad ha pasado a ser uno de los focos, con personal sanitario también afectado y un centenar de ellos puesto en cuarentena. La situación es delicada, porque los ambulatorios están bajo mínimos y precisamente ellos son fundamentales en la lucha contra el virus. No en vano, y por esta razón, el Ministerio de Sanidad ha ordenado “suspender todos aquellos seminarios y congresos que impliquen a los profesionales sanitarios”. Todo para prevenir contagios dentro del sector.

Más allá, no ha sido esa la única medida extraordinaria que ha decidido Sanidad: el ministro Salvador Illa también ha anunciado que “aquellos eventos de competiciones deportivas profesionales en los que se espere una alta presencia de aficionados que provengan de las zonas de riesgo se celebrarán a puerta cerrada”. No se cancelarán, pero se realizarán de esa manera, ha reiterado, especificando que la medida afecta concretamente al partido del Valencia Basket con el Olimpia de Milán, que se tiene que celebrar el 5 de marzo; el partido entre el Valencia y el Atalanta, previsto para el 10 de marzo; el partido del Getafe con el Inter, previsto para el 19 de marzo; y también para esta fecha el partido del Girona - Venecia que es una Eurocopa femenina de Baloncesto. No obstante, ha indicado Salvador Illa, los eventos sujetos a esa recomendación podrían ampliarse.

Con todo, y con independencia de las nuevas medidas, Sanidad recalca que por ahora seguimos en la denominada “fase de contención”, aunque todos los protocolos estén preparados y previstos para todos los escenarios.

Entre tanto, el resto del mundo sigue trabajando también para contener un virus que afecta a más de 70 países y deja ya más de 3.000 muertos. Incluso se combate su impacto en términos económicos, lo que ha forzado a que, por primera vez desde la crisis de 2008, el Banco Central estadounidense haya anunciado una rebaja de medio punto porcentual de los tipos de interés. Y esta vez el Comité de Mercado Abierto de la Reserva Federal de Estados Unidos lo ha hecho de forma preventiva, sin esperar a que se materialice del todo una caída que parece inevitable.

Toda medida es poca para combatir la rápida propagación del Covid-19. Gobiernos como el de Francia han puesto bajo control del Estado todas las mascarillas por decreto presidencial; en Italia se han instalado puntos de control para recibir a todo aquel que se dirija al hospital y prevenir con ello los contagios; el Vaticano ha llevado al Papa a un test de coronavirus en el que ha dado negativo; en Irán se ha sabido que el virus ha llegado al Parlamento contagiando a más de 20 diputados; y en Corea del Sur, el segundo país más afectado tras China, –epicentro del coronavirus–, se desinfectan todos los lugares contrarreloj para intentar frenar un virus al que el presidente, Moon Jae Inn, le ha declarado la “guerra” después de que se superen los 5.000 casos en el país.