Según ha informado el abogado que ha llevado el caso, José Aznar Cortijo, la negligencia se produjo al no practicarle una cesárea de urgencia a la mujer, que estaba embarazada de 37 semanas.
La madre, E.S.G., que tenía diagnosticado un embarazo de riesgo, acudió al hospital el 14 de julio de 2015 al detectar una subida de tensión y una disminución de los movimientos de la bebé y tras ser examinada fue dada de alta, según ha publicado el diario Segre.
Al día siguiente acudió al centro para un control de endocrinología con signos de preeclampsia, fue de nuevo enviada a casa y el 15 se le practicó una cardiotografía en la que se comprobó que el corazón de la niña no latía y se le derivó a un parto de emergencias aunque no se pudo hacer nada por salvar a la bebé.
El abogado del despacho Servicios Jurídicos Verdúm que ha llevado el caso ha explicado que la demanda se ha presentado en Barcelona porque es la ciudad en la que tiene su sede la entidad aseguradora Institut Català de la Salut.
La sentencia del Juzgado de Primera Instancia 22 de Barcelona no es firme, así que puede ser recurrida en la Audiencia de Barcelona. La perjudicada ha asegurado estar muy agradecida a la plataforma de víctimas de negligencias sanitarias "Que no pase más" y al Servei de Suport al Dol de Ponent, que le ha atendido durante tres años.