Llega el verano, el calor, la playa o la piscina y, con frecuencia, también las quemaduras solares. Aunque usemos crema con protección solar, debes conocer esta serie de consejos, recogidos en varias webs de salud, para evitar que el sol dañe tu piel.
1. Esperar a aplicar la crema hasta que se está al aire libre. Se trata de un error muy común. Sin embargo, resulta más efectivo ponerse la loción unos minutos antes de salir de casa.
2. Echarse la crema alrededor de la ropa. Debe tenerse cuidado con los pliegues y tratar de llegar también a las zonas que están tapadas por la ropa o el traje de baño.
3. No protegerse los labios. Éstos también necesitan de su propio bálsamo adecuado para combatir los rayos uva.
4. Olvidarse de otras zonas clave. Tendemos a ignorar algunas áreas como los pies, el cuello, las orejas o las axilas.
5. Crema inadecuada para tu actividad. El sudor por la actividad física o el baño afectan a la efectividad de la crema, así que hay que aumentar la frecuencia o buscar el producto más indicado para dicha actividad.
6. Emplear la fórmula del cuerpo en la cara. También es un error muy común. La piel de la cara es más sensible a la irritación, por lo que debe procurarse un especial cuidado.
7. Echarse crema sólo cuando hace buen tiempo. Cuidado porque los rayos uva también pueden perjudicar a la piel cuando el cielo está nublado.
8. No aplicarse suficiente loción. Los dispensadores de spray pueden inducir a error a la hora de aplicarnos la crema y pensar que ya tenemos suficiente. Hay que asegurarse de que la crema cubre el cuerpo con la cantidad adecuada.
9. No reponer la crema porque es "resistente al agua". Esto es un error, nunca está de más volver aplicarse la loción después de darse un baño o practicar deporte. Tanto el agua como el sudor hacen que los efectos sean mucho menores.
10. Creer que el sol no hace daño cuando vas en el coche o estás en el interior de un edificio. Incluso en estos espacios hay que ser precavidos.
11. Emplear cremas que no cubren todo el espectro. Aquellas con la etiqueta SPF son las más indicadas al cubrir todo el espectro solar que puede afectar a la piel.
12. Elegir un SPF demasiado bajo. Querer ponerse moreno con un SPF 8 puede resultar insuficiente para proteger la piel cuando ésta se expone al sol por un tiempo prolongado, por ello se debe optar por numeraciones superiores (30, 50...).
13. No echarse crema solar con la suficiente frecuencia. Es otro de los fallos que más se cometen. Se recomienda repetir la aplicación cada 80 minutos.
14. No aplicarse crema cuando se está bajo la sombrilla. Ésta no protege del efecto de los rayos solares, sólo de la luz, así que se aconseja emplear crema solar como si se estuviese al sol.
15. No protegerse los ojos. Las gafas de sol son un buen aliado para prevenir los efectos de los rayos uva.
16. No cuidar la alimentación. La crema solar ayuda pero también lo hace desde dentro del cuerpo una alimentación adecuada.