Iglesias estalló. De fachas a acusar a la oposición de descojonarse sobre un tema que, evidentemente provoca más asco e indignación que risa. La prostitución de las menores que debían estar tuteladas por el Institut Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS). Lo que ahora sabemos que era un secreto a voces en la isla donde las menores se escapan y acaban siendo prostituidas sin que nadie haga nada por evitarlo.

La ira del vicepresidente se debía a que tanto la representante del PP, Margarita Prohens, como la diputada de Vox, Mireia Borrás le reprocharon que la izquierda obstaculizara una comisión de investigación sobre el tema. A Iglesias le molestó esta vez la disputa política.

"No creo que ni uno sólo de los 350 diputados de esta Cámara independientemente de su ideología tenga la más mínima duda de que hay que intervenir para que esta situación vergonzosa tenga que terminar. Creo que sus propios votantes se indignan al verles utilizar un elemento como este para hacer la más baja política", añadió, pero lo cierto es que no fueron los partidos de la oposición los que votaron no. Y el uso de la mujer en el debate es una constante en el Congreso, con el presidente a la cabeza. La oposición acusa a Cladera y Armengol de callar y a la izquierda de querer tapar lo ocurrido con las menores tuteladas por el IMAS. "No querer saber o intentar tapar lo que pasa es no querer ayudar a las niñas víctimas de abusos sexuales", dicen.

El escándalo es mayúsculo. Decenas de menores, que se sepa hasta ahora, prostituidas cuando debían estar tuteladas y protegidas por los centros de acogida. Profesionales que desvelan que esto era 'vox populi' y que nadie hacía nada. Como desveló uno de ellos en El Programa de Ana Rosa con una frase que hiela la sangre: “Cuando una niña se escapa del centro y vuelve a la mañana siguiente con unos zapatos nuevos, sabes que se ha prostituido".

La denuncia de una violación grupal hecha por una menor de 13 años que se escapó de un centro de menores en Nochebuena destapaba un auténtico escándalo de prostitución en Palma de Mallorca. “Quiero volver, por fa. Pero estoy metida en un lío. Me han intentado prostituir. Ayúdame”, escribió la joven a la psicóloga del centro de menores. La joven denunció que primero la habían intentado prostituir en un bar y que la habían violado después en grupo.

Entre el martes 7 y el viernes 10 de enero, detuvieron a seis menores y a un joven como sospechosos de haber participado en la violación, directa o indirectamente. Además, uno de ellos habría entregado una grabación a la Policía, con la que demostraría que las relaciones habían sido consentidas. Sin embargo, la víctima se encontraba bajo los efectos del alcohol y las drogas.

Los trabajadores de los centros sociales señalan que ya denunciaron la situación. Según los educadores, la prostitución de las niñas de los centros en la isla "está totalmente extendida". Pese a todo, la Policía no habla de red. "No podemos hablar de una red organizada de prostitución", explica uno de estos expertos. "Se trata de una conducta normalizada por parte de estas menores, que no son conscientes de que abusan de ellas", destacan en medios como el Diario de Mallorca.

En el caso del Consell de Mallorca, los 30 centros de acogida que existen en la isla son gestionados por el Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS).

Los dos primeros arrestos relacionados con este escándalo mostraban la ruina moral de la que estamos hablando. Una mujer dominicana de 50 años y de un hombre guineano de 41 habrían captado a dos menores en un bar y les habían ofrecido regalos, como ropa, teléfonos y dinero a cambio de que mantuviese relaciones sexuales con adultos. La menor aceptó los regalos, pero al negarse a tener relaciones el hombre la agredió. El Consell ha reconocido la existencia de otros cuatro casos de explotación sexual de menores tutelados.

Los educadores sociales han relatado ya a diversos medios que llevaban tres años denunciando estas prácticas y que el Gobierno balear rechazó hasta en dos ocasiones que se investigara al instituto que los tutelaba. Por el momento se tiene constancia de 16 casos por lo que no hablamos de algo puntual. La consellera de Bienestar y Familia de Menorca, Bárbara Torrent ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad después de la polémica y el escándalo asegurando que desde el Servicio Insular de Familia se ha actuado siempre "con la máxima diligencia. Siempre que hemos tenido indicios de un hecho que pudiera ser delictivo lo hemos denunciado, porque consideramos que es nuestra obligación y responsabilidad", ha indicado. Algo que contradice la opinión de los educadores sociales.

El Consejo de Mallorca y el IMAS han reconocido dieciséis casos de menores prostituidos, un niño y quince niñas. Pero las cifras, según los trabajadores sociales, son mucho más altas. En algunos centros, y según sus propios cuidadores, todas las menores ejercen la prostitución. El IMAS tiene en este momento bajo su tutela a 359 menores.

PSOE, MÉS y Unidas Podemos creían más oportuno crear sólo una comisión de expertos, además añaden que la Fiscalía investiga ya los casos denunciados y que la oposición iba a politizar este asunto.

Políticamente la oposición apunta a la presidencia de la comunidad que está en manos de Francina Armengol, del PSOE; a la consejera de Asuntos Sociales, Fina Santiago, de Podemos; al director del IMAS, Javier de Juan, del PSOE y a la directora de Infancia y Familia, María de los Ángeles Fernández Valiente, del PSOE, esposa de José Hila, alcalde de la ciudad donde han tenido lugar los hechos. Hila también pertenece al PSOE.