En plena psicosis con el virus del coronavirus, un ciudadano chino ha saltado a los titulares de los principales medios internacionales por pagar su enfado con unos médicos que le atendieron cuando sospechaba que podía estar infectado del virus.
Según han informado diferentes medios asiáticos, el suceso ocurrió el pasado jueves 27 de enero cuando el hombre acudió hasta el hospital de la ciudad china de Xiaogan tras permanecer cuatro días con fiebre, tos, mocos y malestar general. Cuando se presentó en el centro médico, el paciente advirtió a los profesionales médicos que en los últimos días había estado en la ciudad china de Wuhan, epicentro del temido virus.
Fue entonces cuando los médicos le realizaron las pruebas para descubrir si padecía el virus del coronavirus. Sin embargo, estos análisis dieron negativo por lo que le diagnosticaron una gripe y le dieron el alta. Al no estar completamente convencido del diagnóstico, el hombre decidió cambiar de centro médico y dirigirse hasta el Hospital de Xiaogan de Mujeres y Niños.
En este hospital, los médicos que le atendieron por segunda vez también le diagnosticaron gripe en vez del famoso virus. Tras el diagnostico, los profesionales que le atendieron le recetaron una serie de medicamentos para tratar su fiebre y malestar. Sin embargo, cuando se dirigió al mostrador donde tenía que recoger la receta para poder obtener dichos medicamentos, los trabajadores le comunicaron que estas medicinas no estaban disponibles.
Al recibir esta noticia, el paciente se enfadó y decidió retirarse la mascarilla que cubría su rostro y toser sobre los médicos que le estaban atendiendo y sobre el mostrador que les separaba. Después, el hombre huyó y desapareció del hospital. Sin embargo, los agentes encargados de la investigación han conseguido localizarle y detenerle.
Por su parte, el representante del hospital donde trabajan los médicos ha asegurado que "muchos miembros del personal se encuentran enfadados" pero que no presentaran cargos contra el paciente ya que pueden llegar a entender el enfado del hombre al no conseguir los medicamentos para tratar su gripe.