El Chicle pudo ser "consciente" de que podía "causar la muerte" a Diana, según su defensa
La abogada de Abuín pide entre cinco y siete años para su cliente
Las acusaciones elevan la pena a prisión permanente revisable
Añaden agravante de género por ser una víctima mujer
La defensa de José Enrique Abuín, que ejerce la letrada María Fernanda Álvarez, ha introducido en sus conclusiones finales del juicio la posibilidad de que El Chicle "fuese consciente" en el momento del ataque a Diana Quer de "la fuerza que estaba haciendo sobre la víctima" y de que "podría causarle la muerte". Las acusaciones piden para el acusado la pena de prisión permanente revisable por los delitos de asesinato con alevosía y ensañamiento, detención ilegal y agresión sexual.
La defensa de El Chicle, en sus conclusiones finales ha modificado su escrito para introducir la posibilidad subsidiaria de que José Enrique Abuín hubiese cometido un "homicidio con dolo eventual", en el caso de que el jurado considere probado que El Chicle fue consciente de la fuerza que estaba haciendo mientras estrangulaba a Diana. En este caso, pide para él la imposición de una pena de prisión de entre cinco y siete años.
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En todo caso, la letrada considera inicialmente los hechos constitutivos de un homicidio accidental, por el que pide que se le imponga al acusado una pena de prisión de dos años y medio, teniendo en cuenta la atenuante cualificada de confesión.
Prisión permanente revisable
Por su parte, tanto Fiscalía como la acusación particular, que ejercen los padres de Diana, han elevado a definitivas sus conclusiones provisionales, en las que piden para Abuín la pena de prisión permanente revisable por los delitos de asesinato con alevosía y ensañamiento, detención ilegal y agresión sexual.
Las dos partes de la acusación han introducido en sus conclusiones ligeras variaciones para precisar cuestiones como la medida de la brida y el cable que se empleó para lastrar el cuerpo o dejar constancia de las diferentes versiones que dio El Chicle. La acusación, en el Día Internacional contra la Violencia Machista, ha añadido también una agravante de género por ser una víctima mujer.
Cuando las partes terminen sus alegatos, el acusado podrá hacer uso del turno de última palabra. Es probable que lo haga porque en el juicio de Boiro ya pidió perdón a la familia Quer.