El ‘pin parental’ que Vox quiere establecer como condición al sí a los presupuestos de Murcia y Madrid continúa acumulando reacciones de los políticos. A través de su cuenta de la red social Twitter, el líder del PP, Pablo Casado, ha defendido no autorizar la asistencia de sus hijos a actividades complementarias incluidas en el currículo escolar, ante lo que la ministra de Igualdad, Irene Montero, ha respondido con contundencia.
“Mis hijos son míos y no del Estado, y lucharé para que este Gobierno radical y sectario no imponga a los padres cómo tenemos que educar a nuestros niños. Saquen sus manos de nuestras familias”, ha escrito el líder del PP.
“En tu partido presumís mucho de constitucionalistas pero nunca leéis la Constitución. Ningún padre puede negar el derecho a la educación a sus hijos e hijas, por muy “suyos” que sean”, ha respondido Montero.
“Maltratasteis a las familias españolas privatizando hospitales y colegios, precarizando el empleo o negando el derecho de algunas familias a serlo simplemente porque no os gustan. La familia se protege cuidando la convivencia y los servicios públicos que como la educación garantizan la dignidad a todas las personas independientemente del dinero que tengan o del barrio en el que vivan. Defendiendo el PINAbascal os situáis fuera de la ley, fuera del Pacto de Estado contra la violencia de género, fuera de la Constitución y fuera del sentido común”, ha defendido, antes de concluir: “Ayudemos a que nuestros hijos e hijas sepan que pueden amar a quien quieran, que aprendan a respetar al diferente y que se enorgullezcan de lo mejor de España; lo público, lo común”.