El motivo fundamental del ahorro fue que la medicación empleada en el experimento era proporcionada por la compañía farmacéutica promotora del ensayo, y no del mismo centro hospitalario como en el caso de los tratamientos convencionales.
En este mismo proceso se tuvieron en cuenta otras variables como el coste del tratamiento genérico que hubiera recibido el paciente si no hubiera participado en el ensayo y el número de ciclos, excluyéndose el coste de los tratamientos concomitantes.
El resultado arrojó datos considerablemente favorables ya que, según los datos aportados por Luis Sánchez-Rubio, miembro del Servicio de Farmacia del Hospital La Paz, realizar este proceso de manera externa reduce un coste medio de 31.298 euros. Una cifra que varía según el tipo de cáncer al que esté destinado el análisis: 94.907 euros menos en ensayos en melanoma, 38.501 en cáncer de pulmón, 67.268 en el caso de cáncer de colon o 20.274 en cáncer de páncreas, entre otros.
Asimismo, la entidad farmacológica española Farmaindustria ha presentado el 'Proyecto BEST en investigación clínica', que relaciona el 52 % de los ensayos clínicos impulsados por estas compañías en España con una fase inicial de la investigación, los que implican mayor responsabilidad. A su vez, este tipo de ensayos también se ha incrementado en un 41% desde el año 2004 en España.
Por último, la responsable de la Plataforma de Medicamentos Innovadores de Farmaindustria, Amelia Martín Uranga, ha señalado la existencia de una "tendencia positiva que explica cómo España ha logrado posicionarse en los últimos años como uno de los países europeos más atractivos a la hora de atraer inversiones en investigación clínica", ha concluido.