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Agentes de la Policía Nacional no han podido interrogar este viernes a Macarena, la madre con problemas psíquicos que asegura haber quitado la vida a su hijo con discapacidad sensoria el pasado domingo, debido a un nuevo brote.
Se trata de una de las líneas de investigación abiertas para intentar esclarecer el caso que este jueves daba un importante paso al localizarse en un contenerdor próximo a la vivienda familiar de Morón de la Frontera, en Sevilla, un móvil de Macarena que había sido arrojado para evitar ser rastreada.
Hay otros dos números investigados que están inoperativos. Sí han detectado su coche por las cámaras en varios tramos de autovías, Pero llevaba cristales oscuros atrás y no pueden saber en que momento entre Talavera y Carabias ya no viajaba Antonio David.
Los investigadores tratan de contrastar la última versión de la madre porque no creen que tuviera a su hijo Antonio David cuatro días muerto en la casa antes de fugarse el domingo. Tampoco creen que lo moviera ya cadáver en la silla de ruedas en el hotel de Talavera donde pararon. Ni que ella pudiera arrojarlo a un contenedor de Madrid con la silla como dijo al principio, cuando explicó que se murió en el viaje.
El asunto gira en torno a un matrimonio de Morón con dos hijos a su cargo, una joven de 18 años y un adolescente de 13 que padece una discapacidad física, toda vez que los miembros del matrimonio se habrían separado, contando la mujer al comienzo de la separación con la custodia de los dos hijos.
En ese contexto, agentes de la Guardia Civil habrían intervenido a la mujer en una carretera de la provincia de Segovia, donde habría detenido su coche, "desorientada" y manifestando declaraciones "inconexas" a los funcionarios. La mujer habría relatado a los agentes que llevaba consigo a su hijo de 13 años de edad y que le habría matado, deshaciéndose después del cuerpo según su testimonio.
A cuenta del estado de la mujer, que presentaría alteraciones mentales, la misma habría sido trasladada a un centro hospitalario de Segovia para recibir asistencia médica, contactando la Guardia Civil con el padre del mejor y expareja de la mujer, para interesarse por el paradero del chico.
Desde Morón, el padre y la hermana del muchacho habrían manifestado a los agentes que pensaban que el chico estaba con su madre, siendo informados del testimonio de esta mujer. Ante el relato de la mujer respecto a que habría matado a su hijo y se habría desprendido del cadáver, el padre del mismo acudió el pasado lunes a la Comisaría de la Policía Nacional de Morón para formular una denuncia por la desaparición del chico.
Fruto de ello, los agentes de la Policía Nacional de Morón visitaron la vivienda de la mujer, averiguando que la misma se habría deshecho de enseres y se habría marchado el pasado domingo por la tarde de Morón llevando al chico con ella. A partir de ahí, y según las pesquisas de los agentes, habrían pasado la noche del domingo en un hotel de Talavera de la Reina (Toledo), donde ambos fueron vistos y desde donde habrían proseguido su viaje, siendo después la mujer localizada por la Guardia Civil en la situación ya descrita.
En cualquier caso, la Policía Nacional ha abierto una investigación para localizar al menor y esclarecer la veracidad o no del testimonio inicial de su madre, que después habría asegurado que no mató como tal al chico, sino que el mismo "murió" y después se deshizo del cadáver.