Las multas de las borracheras de los menores recaerán sobre sus padres
El informe elaborado por la Comisión mixta Congreso-Senado sobre Drogas, sienta las bases para la futura ley de prevención del consumo de alcohol en menores. Aunque están pendiente de ratificación, recomienda al Gobierno, entre otras cosas, que evitar que ya a los 14 años se emborrachen, pasa por la educación y el control de las familias. De ahí que se sugiera no solo que padres, madres y tutores paguen las multas derivadas de sorprender a los menores bebiendo en la calle, sino cuando sufran intoxicación etílica. Sino que, en caso de reincidencia del menor, y constatando la negligencia de sus adultos responsable, se aplique la ley del menor y pueda derivarse medias sobre la custodia.
Los menores en España beben alcohol porque les resulta fácil acceder al mismo. Muchos locales se saltan el control de identidad, y hay mayores que les compran la bebida. Por eso se contempla agravar las penas y sanciones a los locales que se salten la ley y, en caso de reincidencia, se podría llegar a su clausura.
Para evitar el consumo y abuso de alcohol cuando no se han cumplido los 18, se recomienda quitar cualquier bebida alcohólica de las máquinas expendedoras internas, de los escaparates de supermercados y establecimientos, que no sea especializado. También se prohibiría la vena de alcohol en gasolineras y un incremento de las tasas fiscales según la graduación de la bebida.
No se descarta prohibir el botellón y hacer controles de alcoholemia a los menores. Y para evitar el fomento de los atracones a los que tan aficionados parecen los más jóvenes, pueden tener los días contados las promociones y las conocidas como "hora feliz". Son propuestas para una ley que el Gobierno quiere aprobar en este año.