Un bombero de Pensilvania ha perdido a sus tres hijos en el incendio de una guardería, donde les había llevado porque tenía turno de noche. Cuando los bomberos recibieron el aviso, el padre estaba trabajando en otra emergencia sin saber que sus niños estaban en peligro.
En el incendio de la guardería nocturna de Pensilvania, EEUU, murieron cinco niños, entre ellos los tres hijos del bombero, Luther Jones.
Jones estaba atendiendo otra emergencia cuando el departamento recibió el aviso del incendio en la guardería, según informa Univisión. Los compañeros del bombero han advierto una cuenta bancaria para que la familia reciba donaciones con la que celebrar el costoso funeral de sus tres niños. La familia solía llevar a los pequeños a esa guardería nocturna siempre que los padres trabajaban en el turno de noche.
Entre los fallecidos también está el hijo de la dueña de la guardería. La mujer resultó herida en el incendio.
Los bomberos señalaron que la instalación eléctrica de la guardería no era adecuada. Hallaron muchos cables conectados debajo de un sofá . Además, en el lugar solo contaba con un detector de humo que se encontraba en el ático. Según el jefe del Departamento de Policía, Guy Santone “no sirvió para nada”.