En un artículo publicado en el Daily News, la responsable del spa para bebés, donde también se enseña a las madres a dar masajes de 25 minutos a sus hijos, indica que el objetivo del programa es desarrollar el bienestar físico, mental y emocional del bebé".
En Float Baby, cuyo precio es de casi 90 euros por sesión (65 dólares), los bebés flotan en una pequeña piscina con agua purificada, no clorada, durante unos 20 ó 25 minutos. Los pequeños llevan una cámara de aire alrededor del cuello y se proporcionan pañales de natación así como toallas calientes. Las madres se quedan cerca, a un brazo de distancia.
Los bebés llevan alrededor del cuello una cámara de aire, a la manera de un flotador pero, a diferencia de los normales, con estos los bebés tienen las extremidades libres, lo que “permite el desarrollo neurológico temprano del bebé”, según Kristi Ison, responsable del spa.
Según una pediatra consultada por Daily News, las actividades con la madre, ya sean natación, yoga o cualquier otra disciplina, son buenas para la socialización y la comunicación con el pequeño, pero no necesariamente se requiere que “floten en un spa”. Añade que el masaje es una buena manera de relacionarse con el bebé, pero que no se necesita hacerlo en un spa. Y, sobre las cámaras de aire en torno al cuello del bebé, “no es algo que recomendaría”.