En la ciudad francesa de Saint-Malo, una madre denunciará a una conocida marca de leche por, supuestamente, poner en riesgo la salud de su hijo. Según han informado diferentes medios franceses, la mujer llevará a los tribunales a la empresa después de que su hijo de tan solo tres meses tuviera que ser ingresado por la fiebre tan alta que padecía.
Al parecer, el menor comenzó a ponerse malo y a tener fiebre. Fue entonces cuando su madre le llevó al hospital y, allí, le ingresaron para tratarle. Una vez en el centro médico, el bebé vomitó un gusano de unos seis o siete centímetros de largo.
Semanas más tarde del suceso, el menor fue dado de alta y, en el centro médico, analizaron el gusano que expulsó. Al recibir las pruebas, la madre pudo certificar que se trataba de un parásito.
Por eso, la mujer comenzó una investigación para averiguar dónde había aparecido dicho parásito. Fue entonces cuando descubrió que hacía unos meses, otra familia había encontrado unas larvas vivas en un frasco de leche en polvo de la misma marca que consumía su hijo.
Tras hacerse público el escándalo, la marca ha pedido que se retiren los botes de leche en polvo que haya en Francia para poder analizarlos y averiguar a qué se debe la aparición de estos supuestos parásitos. Hay “varias hipótesis que podrían explicar la presencia del insecto", revelan.