Mientras se practican las gestiones pertinentes para poder determinar cómo un niño de tan corta edad pudo sufrir dicha intoxicación, se han remitido muestras de orina a toxicología con el fin de concretar, en la medida de lo posible, el nivel de toxicidad, y si se produjo por impregnación o por ingesta directa, precisan las mismas fuentes.
También se ha acordado la realización de un análisis de cabello del bebé para determinar si ha habido consumo continuado en el tiempo, lo que serviría para constatar si existió una facilitación directa o se trata de ingesta accidental. Mientras se realizan estas indagaciones, la custodia del bebé la asumirá la Xunta de Galicia.
Sin embargo, el abogado de la madre, Javier Latorre, en declaraciones a Europa Press, sobre la información que adelantaba este sábado 'El Progreso de Lugo', ha explicado que el viernes por la mañana ya presentó un recurso ante el Juzgado al considerar que la medida de retirada de la custodia del bebé es "desproporcionada", porque se decretó sin que haya informe del fiscal ni se le haya tomado declaración judicial a la mujer. El fiscal tiene dos días hábiles para responder al recurso, con un plazo que concluye el martes.
En su opinión, "lo sorprendente, jurídicamente, es que según llega el parte médico del hospital al Juzgado --el día 19 de septiembre--, en el que se hace mención a que un niño dio positivo por tetrahidrocanabinol, la Jueza de instrucción dicta auto en el que le retira la custodia a la madre (...) y se la da a la Xunta, sin informe de menores, del fiscal, sin saber cómo se había producido esa ingesta o si fue un descuido".
En este sentido, alude al hecho de que a la mujer no se le ha tomado declaración judicial y que se le permite que acuda y esté presente, ha explicado, todos los días en el hospital atendiendo al menor sin que se haya adoptado ninguna medida preventiva. "Van cinco días, no la han llamado a declarar, no la han llamado del Juzgado, si sospecharan desatención grave lo mínimo es que le tomaran declaración, como investigada o detenida", ha agregado el letrado.
Además, también tacha de "absolutamente precipitada" la decisión de entregarle la custodia a la Xunta "sin saber si tiene más familia", puesto que la mujer tiene madre y una hermana que se podrían hacer cargo, añade. También tiene otros dos hijos de 14 y 16 años, que viven con el padre.
El abogado defensor, basándose en la versión de su cliente, explica que los hechos pudieron suceder el día 17 hacia última hora de la tarde, cuando la mujer se encontraba con el bebé en la zona "de terrazas" de Vilalba, en donde cree que pudo haber cogido e ingerido de forma accidental algún trozo de hachís o una colilla. "La madre no se lo explica, porque ella no es consumidora ni en su casa hay hachís y está dispuesta a que le hagan los análisis necesarios para demostrarlo", argumenta.
El letrado relata que el niño llegó en perfecto estado a su casa el lunes y se durmió sin problemas. Sin embargo, cuando a las seis de la mañana se despertó para tomar el biberón, como hacía habitualmente, la madre y su pareja comprobaron que comenzaba a actuar de forma extraña y sufría espasmos, así que decidieron llevarlo ellos mismos al centro de salud de Vilalba, de donde fue trasladado al Hospital Universitario Lucus Augusti de Lugo.
En las pruebas realizadas se comprobó la presencia en el organismo del niño de tetrahidrocanabinol, un compuesto del hachís y de la marihuana, aunque el abogado argumenta que la mujer explicó que el niño, que ya camina, solía meter las cosas que coge en la boca y que pudo haberla ingerido de forma accidental, igual que pueden coger otras cosas, como "una chincheta". El menor continua de momento hospitalizado, aunque el letrado estima que recibirá el alta el lunes, al encontrarse ya en "buen estado".
Tanto la madre como el padre del menor ya prestaron declaración al día siguiente de los hechos ante la Policía Nacional, que ya remitió las diligencias al Juzgado, según han precisado fuentes policiales a Europa Press.