Beatriz Zimmermann, madre de Anna y Olivia en una carta: "la solución para erradicar la violencia vicaria está en nosotros"
Beatriz sueña con tener "la solución a erradicar la violencia vicaria, pero no soy yo quien la tiene, la tenemos cada uno de nosotros
Beatriz afirma que su gran ilusión es que "el mundo sea un mundo mejor y ayudar a las personas a sentirse mejor
Por eso no quiere hablar del caso "me da angustia. No siento que yo vaya a ayudar a nadie contando lo que he sentido".
Beatriz Zimmermann ha vuelto a dar señales de vida en una carta enviada a El Programa de Ana Rosa, en la que ha detallado cómo se encuentra tres meses después de la desaparición de sus hijas, presuntamente asesinadas por su padre. El cuerpo de este nunca apareció al igual que el de Anna aunque sí se logró encontrar el de Olivia por lo que la tesis de que el padre de las niñas huyera con ellas a algún país remoto se descartó desde ese mismo instante.
En la carta, Beatriz afirma que su gran ilusión es que "el mundo sea un mundo mejor y ayudar a las personas a sentirse mejor". Por eso no quiere hablar del caso "me da angustia. No siento que yo vaya a ayudar a nadie contando lo que he sentido".
Beatriz prefiere escribir un mensaje más esperanzador: "La única manera de superar algo así es creer y tener fe, que estamos aquí de paso. Que venimos a este mundo a ser buenas personas, dar amor y sobre todo a respetar. Beatriz sueña con tener "la solución a erradicar la violencia vicaria, pero no soy yo quien la tiene, la tenemos cada uno de nosotros cada día a cada momento. Sé que hay muchas más personas buenas que más, muchísimas más, me lo demostraron al ayudarme a buscar a mis niñas".
"Yo no creo en la lucha porque cuando luchamos contra algo creamos odio e ira. Sé que hay muchas más personas buenas que malas, lo demostraron al ayudarme a buscar a mis niñas". En la carta Beatriz también da consejos para que la gente denuncie ante la primera falta de respeto. "El problema viene cuando permitimos malos tratos, ni un desprecio, si nos concienciáramos, no lo haríamos crecer". o creo en la violencia para combatir la violencia y los malos sentimientos, me ha tocado vivir lo más duro. Yo lo veo como semillas que plantamos todos los días, si las semillas no son de amir y de respeto, el fruto no puede ser bueno".
"Mi consejo es ser cuidadosos con los actos, pensamientos y palabras, es lo que transmistía a mis niñas todos los días. Deseo un mundo en paz y armonía. Tengo esperanza en que todo mejore si todos ponemos de parte con buenos sentimientos. Beatriz, mamá de Anna y Olivia, mis angelitos.