La región de Murcia entraba ayer en la fase 1 y muchas personas volvían al trabajo. Esto ha provocado que se hayan dado imágenes sorprendentes en un autobús de línea de la ciudad en el que se podían ver a pasajeros agolpados y sin respetar la distancia de seguridad.

A pesar de las amenazas de los pasajeros de llamar a la policía y las quejas, en cada parada subían más viajeros. Los responsables de la gestión de transportes han admitido algunas aglomeraciones puntuales y han informado que a partir de esta mañana, aumentará la frecuencia en la mayoría de las líneas.

Desde que se declara el estado de alarma el pasado 15 de marzo, el transporte público se ha convertido en uno de los focos de mayor control para evitar imágenes como esta. Este medio por el viajan cientos de personas al día, debe de respetar unas pautas comunes para su uso y se debe de ser riguroso a la hora de respetar la distancia mínima de seguridad.

En primer lugar, se obliga a todos los viajeros que se suban a llevar mascarilla. Al igual que en los bares y los comercio, el autobús también tiene estipulado un aforo máximo del 50% de la ocupación. Los pasajeros no pueden ir sentados uno junto a otro por lo que se debe dejar una fila entera libre entre los asientos. Los viajeros también deben guardar la distancia de seguridad cuando vayan de pie y se recomienda que no haya más de dos personas por medro cuadrado dentro del autobús.

Estas medidas parecen no haberse respetado en la ciudad de Murcia, pero tampoco en un vuelo de Madrid-Canarias que nos dejaba el domingo imágenes impactantes de un avión repleto de pasajeros en el que no se guardaba en ningún momento la distancia mínima de seguridad.

La compañía aérea han señalado que las normas por el estado de alarma dice a los operadores que "deben procurar la máxima separación, pero no cita restricciones específicas".

"¿Dónde está la distancia de seguridad? Va el avión casi completamente lleno y no hay ni siquiera un asiento de separación entre pasajeros. ¡Esto es una vergüenza!". Estas han sido las quejas en Twitter de muchos de los viajeros que volaron en el avión desde Madrid.

Desde Iberia Express han explicado a Europa Press que cumplieron las directrices marcadas en el decreto del estado de alarma y han subrayado que tienen un plan de acción contra el coronavirus para garantizar la seguridad de sus pasajeros, todos residentes en la isla.

Los aviones tienen incluido un sistema de aire que permite su renovación cada dos y tres minutos -- filtro HEPA-- con "una eficiencia del 99,9 %" contra virus y bacterias, por lo que el riesgo de contagio es bajo, han explicado desde Iberia. Además, de que la compañía asegura haber reforzado la desinfección y limpieza diaria y ha eliminado servicios como el catering.

La Guardia Civil ha denunciado a Iberia Express por incumplir, en su vuelo operado este domingo desde Madrid a Gran Canaria, las medidas sanitarias incluidas en el real decreto que regula el vigente estado de alarma con el que se pretende frenar la propagación de la Covid-19. Fuentes del instituto armado han informado de que, tras conocer la información que se estaba difundiendo en redes sociales sobre la alta ocupación de este vuelo, varios agentes se personaron en el aeropuerto de Gran Canaria para hacer varias comprobaciones.

En esa inspección, los agentes pudieron constatar que la aeronave había partido de Madrid con una ocupación que superaba el 70 % de su capacidad, lo que implica incumplir lo establecido en el artículo 14 del citado real decreto, en relación a las medidas sanitarias que se deben cumplir en los medios de transporte, donde se ha de garantizar la máxima distancia posible entre pasajeros, han explicado las fuentes.