Audiencia de Lleida condena a 9 años a un padre por maltratar bebé de 10 días
Condenado a Carlos T.T. a 9 años de cárcel por haber maltratado a su bebé de 10 días
El bebé estuvo dos meses ingresado con daños muy graves que le han dejado serias secuelas
Las graves lesiones sufridas por el bebé eran compatibles con golpes reiterados
La Audiencia de Lleida ha condenado a Carlos T.T. a 9 años de cárcel por haber maltratado a su bebé de 10 días, que estuvo dos meses ingresado con daños muy graves que le han dejado serias secuelas, según la sentencia hecha pública por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC).
La Audiencia ha condenado a Carlos T.T. como autor "criminalmente responsable de un delito de lesiones agravadas", con la concurrencia de las circunstancias agravantes de parentesco y de abuso de superioridad, a la pena de 9 años de prisión.
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No podrá acercarse al menor
Además, el tribunal le inhabilita para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo y para el ejercicio de la patria potestad sobre el menor durante el tiempo que dure la condena, y tampoco podrá acercarse al menor a una distancia no inferior a 100 metros, a su domicilio o a cualquier lugar en que se encuentre, ni podrá comunicarse con él durante diez años.
La Audiencia de Lleida le impone el pago de una indemnización en concepto de responsabilidad civil de 600.000 euros, más los intereses correspondientes, así como el pago de la mitad de las costas.
Sentencia absuelve a la madre
La sentencia absuelve a la madre, D.M.M.B., del delito de lesiones y establece dejar sin efecto las medidas adoptadas durante la instrucción de la causa.
Los hechos ocurrieron en el verano de 2019 cuando el padre, según reconoció en el juicio, sacudió al bebé en la madrugada del 13 de agosto, aunque aseguró que lo hizo porque quedó en shock tras caer del sofá y dijo incluso que días atrás se había caído de la sillita del coche porque olvidó atarlo.
Sin embargo, los informes de los peritos señalaron que las graves lesiones sufridas por el bebé eran compatibles con golpes reiterados.
Los padres llevaron al bebé al hospital Arnau de Vilanova de Lleida y, desde allí, le trasladaron al hospital Vall d'Hebron de Barcelona, cuando el bebé recibió el alta del hospital quedó al cuidado de la Generalitat.
