David Vargas, el excura estafador que dejaba en la ruina a las ancianas que confiaban en su asesoramiento espiritual y material tenía en su casa más de tres millones de euros. Cuando se vio acorralado por la policía intentó suicidarse lanzándose desde un puente en Barcelona pero no lo logró. Temiendo que se fugue o que vuelva a intentar hacerse daño, la Justicia dictó su prisión preventiva esta semana.
Fermín Morales, abogada de una de sus víctimas, de 91 años, ha desvelado a Informativos Telecinco cómo se ganaba la confianza de las ancianas. Las separaba de su familia, tenía hasta las llaves de su casa. Sabía transmitir una confianza que luego traicionaba.
Sus víctimas eran mujeres de alto poder económico (podría haber más afectadas) que ven cómo desaparecen de sus casas cuadros, arte sacro, cuberterías... su gran valuarte era el alzacuellos que daba tranquilidad a las ancianas.
Miguel Martín, sargento a cargo de la investigación destaca que puede haber más afectadas porque en el domicilio del falso cura que seguía haciéndose pasar por uno ( fue párroco de la Iglesia de Sant Vicenç de Castellet, en Barcelona, hasta 2013 cuando fue expulsado por unas fotos eróticas con un joven) se encontró documentación y la cantidad de dinero es tal que por lógica saldrán a la luz más casos. David Vargas se hacía la víctima y conseguía que le enviaran hasta comida a casa, que le lavaran la ropa. Se hacía pasar por un entendido en obras de arte, lo que puede explicar muchas cosas.