Sin descanso y seis días después de la tragedia, los servicios de rescate continúan buscando al pequeño Artur, desaparecido en las inundaciones que asolaron Mallorca dejando un total de 12 fallecidos y numerosos daños materiales.
De tan solo cinco años, el niño iba con su madre, Joana Lliteras, farmacéutica de 40 años y oriunda de Manacor, y con su hermana, Úrsula, de 7, cuando se vieron sorprendidos por la terrible tromba de agua que dejó la tormenta. Estaban en el interior del coche de Joana, quien, tomando conciencia de la gravedad de la situación, de inmediato intentó por todos los medios salvar a sus hijos. Primero cogió a Úrsula y logró sacarla del coche, que se encontraba, en esos instantes de terror, a merced de la riada, que discurría con tal fuerza que arrastraba cualquier vehículo que encontraba a su paso.
Después intentó salvar también al pequeño, y murió intentándolo. Los servicios de rescate encontraron su cuerpo en el interior del coche, pero no había señales del niño, al que todavía hoy se sigue buscando.
Úrsula, por su parte, logró salvar su vida gracias al arrojo de su madre primero y a la ayuda de un ciclista alemán después. Daniel Thielk se encontraba en ese preciso instante en el lugar de los hechos y, al ver a la niña en medio de la riada, se apresuró a socorrerla.
En declaraciones a RTL, el alemán ha explicado que la niña se encontraba a merced del agua cuando la vio y rápidamente se acercó para agarrarla. “Estaba aterrorizada”, describe, explicando que tras rescatarla se refugiaron en una cabaña durante horas. Allí, la arropó hasta que se quedó dormida, y fue instantes después cuando se la entregó a las autoridades.
Tras conocer el suceso, la familia lanzó inmediatamente una petición para localizarle y poder darle las gracias por haber salvado a la niña, algo que finalmente tuvo lugar en un emotivo encuentro.
ARTUR SIGUE DESAPARECIDO
No obstante, cada día que pasa es un nuevo golpe para la familia, sumida en el dolor por la pérdida de Joana, –la madre de los pequeños–, pero también por la desesperación de no encontrar a Artur y por la angustia de tener que asumir que la probabilidad de que sea hallado con vida es mínima.
Si bien siempre se quiere dar lugar para la esperanza, son conscientes de que son demasiados días los que han transcurrido sin tener noticias de él y de que las circunstancias en las que se produjo su desaparición no ayudan a dejar de pensar en lo peor.
INTENSIFICAN LA BÚSQUEDA
Durante la tarde de este lunes, tal y como informa el Diario de Mallorca, un perro de la UME ha marcado y reparado en una zona en concreta, lo que ha llevado a intensificar la labor de búsqueda en ese punto.
De acuerdo al citado medio local, una veintena de agentes, junto a otros operarios, están extrayendo los escombros de la zona y excavando cuidadosamente el terreno con el fin de encontrar al pequeño o alguna pista que dé con su paradero.
Así mismo, multitud de vecinos, volcados en ayudar tras la tragedia se han sumado por su parte a la labor de búsqueda.