Veinte años de espera para poder sacarse el carné de conducir
Subimos al coche con Celia y comprobamos que no hay osbtáculos en su camino. Esta mujer de Arteixo, en A Coruña, ha esperado veinte años para poder ponerse al volante. No tiene brazos y necesitaba un coche adaptado a sus discapacidad. Encendido por botón, luces automáticas, intermitentes en los pedales o mandos de aceleración en el volante. Una conductora que necesitaba el coche antes que el carné. Un automóvil con cualidades que no existían en los noventa cuando cumplió los 18 años. Ahora volvió a recuperar su reto de conducir y la DGT le permitió hacer las prácticas en su coche, algo imprescindible en su caso. Cuando logró el aprobado demostró que no hay que ponerle freno a los sueños. Celia es conductora novel pero para ella esta L significa libertad.