Ana Julia confiesa que golpeó de forma fortuita a Gabriel cuando iba a atacarla con un hacha
Hasta ahora la habíamos visto firme, altiva, tranquila, con una actitud desafiante ante los investigadores. Sin embargo, después de 48 horas de un rotundo silencio, solo roto por la rabia de los ciudadanos, Ana Julia no ha podido mantener su coraza. Este medio día, mientras se celebraba el funeral del pequeño Gabriel, declaraba y confesaba los hechos. En su declaración ha contado que en torno a las 3 y media de la tarde salió de la casa después del niño, se lo encontró en el camino y le propuso ir a la finca familiar a pintar. Según ella allí se produjo una discusión entre ambos, en la que el niño agarra un hacha, le ataca y ella al arrebatársela le produce un golpe fortuito en la cabeza. Continúa su testimonio en el que asegura que se asustó y terminó por asfixiarle. Después lo desnudó y enterró el cadáver. Todo este proceso le llevó dos horas. A las 6 de la tarde vuelve a casa de la abuela y espera a que sea ella quien en torno a las 8, al no saber del pequeño, de la voz de alarma. Una confesión edulcorada según los investigadores y en la que sí ha declarado que lo hizo sola. Tras contar su versión de los hechos, su abogada aseguraba que se encuentra relajada. Mañana sobre al mediodía Ana Julia quedará en manos de la justicia.