El salmón, la caballa, las sardinas y la trucha son solo algunos ejemplos de los pescados grasos que pueden reducir la ansiedad. Un grupo de científicos ha publicado un estudio que informa que comer salmón tres veces por semana reduce la ansiedad autoinformada. Estos productos contienen altos niveles de vitamina D que contribuyen de forma positiva a la depresión. La serotonina y las yemas de huevo fomentan a la creación de serotonina, que mejoran la función cerebral y alivia la ansiedad.
Las semillas de sémola proporcionan grandes cantidades de zinc que promueven el desarrollo de cerebro y nervios. Un estudio señala que la falta de zinc puede afectar negativamente al estado de ánimo.
Además de estos dos productos, el chocolate negro es también conocido por reducir la ansiedad, tal y como reza un estudio de 2014. Además, fomenta la disminución de la neuroinflamación y muerte celular del cerebro.
El yogur es un alimento que normalmente va acompañado del chocolate, y en Según un estudio reciente, el yogur y otros productos lácteos pueden generar un efecto antiinflamatorio en el organismo.
Alimentos como las semillas de calabaza, los champiñones, las patatas y las lentejas con ricas en potasio, por lo que fomentan a reducir los síntomas de estrés y ansiedad.
El té posee un aminoácido denominado teatina, que provoca un refuerzo positivo sobre los trastornos del estado de ánimo, ya que aumenta la producción de serotonina y dopamina.