El pasado 2 de julio, el asistente virtual de Amazon, Alexa, realizó una llamada a la policía tras escuchar la paliza que supuestamente le propinó Eduardo Barros a su pareja en Nuevo México.
El presunto agresor se encontraba en su vivienda con su novia y su hija cuando comenzó la discusión por celos, ya que Barros acusaba a la mujer de haberlo engañado. En ese momento sacó un arma de fuego y amenazó con matarla. Durante las agresiones, Eduardo le preguntó si había llamado a la policía, algo que interpretó el comando virtual de Alexa, que estaba conectado en ese momento y realizó una llamada al 911.
En declaraciones recogidas por el New York Post, el sheriff del Condado de Bernallillo, Felicia Romero, confirmó que había sido el asistente virtual, conectado a un teléfono fijo de la casa quien había realizado la llamada.
Cuando la policía se personó en la vivienda, pudieron rescatar a la mujer, con heridas leves, y a su hija, quien no sufrió daños. Ambas se encuentran en paradero desconocido, pero protegidas por las autoridades.
El alguacil del condado de Bernalillo, Manuel Gonzales, aseguró que "El uso inesperado de esta nueva tecnología para contactar a los servicios de emergencia posiblemente ayudó a salvar una vida".