Los Mossos d’Esquadra detuvieron la semana pasada a cuatro hombres, de 20 a 23 años, como presuntos autores de una violación grupal en Molins de Rei. Ahora todos aseguran que las relaciones fueron consentidas.
La supuesta violación ocurrió el pasado mes de mayo. La joven pidió ayuda al vigilante de seguridad de una estación de Ferrocarriles. Estaba asustada , desorientada y avergonzada.
Le contó que varios jóvenes la habían metido en un maletero para violarla y luego la habían tirado en marcha del coche. Llevaba las medias rotas y se tapaba el torso con una chaqueta. En el informe del hospital se habla de lesiones compatibles con una agresion sexual.
La chica hizo cuatro declaraciones diferentes pero manteniendo siempre que fue violada por cinco hombres.
En la primera aseguró que no los conocía "me cogieron violentamente y me metieron en un maletero, a los 15 minutos se detuvieron en un descampado y mientras uno me cogía fuerte los brazos, los otros me penetraron vaginalmente".
Llegó a decir que le robaron el móvil, pero en su segunda declaración recordó que lo había perdido junto a su bolso en la discoteca.
En su tercera declaración explicó que antes de su rapto y violación estuvo tomando cocaina con otro grupo diferente de chicos.
En la cuarta declaración ante el juez dio más detalles de la violación grupal. y describió el tatuaje de uno de ellos. Además recordó lo que dijo "dejarla que esta nos la va a liar".
Los acusados, al ser detenidos, y un testigo explicaron que la chica tomó cocaina y cristal con ellos y de manera consentida tres reconocieron haber mantenido relaciones sexuales y dos las negaron. También hicieron fotografías y vídeos, pero las borraron.
La víctima no los identificó en la rueda de reconocimiento y la Fiscalía no pidió prisión provisional porque faltan pruebas por practicar. Los Mossos buscan las posibles imágenes grabadas por cámaras de seguridad que puedan esclarecer lo ocurrido.