El futbolista utrerano José Antonio Reyes, fallecido el 1 de junio de 2019 tras un accidente de tráfico, circulaba como mínimo a 187 km/h cuando pereció en la carretera A-376 a la altura de Alcalá de Guadaíra (Sevilla), perdiendo la vida también su primo Jonathan Reyes.
Así lo adelantó este miércoles la Cadena SER en el tramo local de Sevilla, haciéndose eco de la conclusión a la que había llegado la Guardia Civil de tráfico tras efectuar sus investigaciones sobre el siniestro.
Acorde a la información de la SER, reventó la rueda trasera izquierda del Mercedes Brabus S550 y eso hizo que José Antonio Reyes perdiera el control absoluto del coche mientras estaba al volante.
"El vehículo se salió de la autovía, volcó y se incendió a unos 200 metros de la autovía", recordó la emisora, añadiendo que el informe pericial ya está disponible en el juzgado que investiga los hechos en Alcalá de Guadaíra.
Después del accidente, algunos medios publicaron que el accidente de Reyes se debió al reventón de una rueda y una velocidad de 237 kilómetros por hora.