Indemnizan a una familia con 347.587 euros por la muerte de un trabajador a consecuencia del amianto

  • El empleado estuvo expuesto al amianto entre 1972 y 1979

  • Una indemnización concedida por el Juzgado de lo Social número 3 de Pamplona

Se ha confirmado la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Navarra en relación a la indemnización de 347.587,36 euros concedida por el Juzgado de lo Social número 3 de Pamplona a la viuda y dos hijos de un trabajador que murió de cáncer debido a la exposición al amianto, según ha explicado Pamplonaactual.

Fue trabajador de la empresa BSH de Estella, y falleció a consecuencia de un cáncer de pulmón causado por el amianto inhalado entre 1972 y 1979. La Sala de lo Social del TSJN ratifica tanto la indemnización impuesta a BSH, así como la absolución decretada por el juzgado de primera instancia tanto del Gobierno de Navarra como de la empresa ACS de cualquier responsabilidad por la enfermedad y fallecimiento del trabajador.

Por lo que la familia del trabajador recibirá 307.587,36 euros, mientras que cada uno de los dos hijos del fallecido 20.000 euros. El empleado, nacido en 1948, prestó sus servicios en la empresa AGNI de Estella entre el 1 de septiembre de 1972 y el 7 de enero de 1979, y entre el 9 de febrero de 1979 y el 31 de enero de 1990. Posteriormente, la empresa fue adquirida por BSH, firma para la que trabajó desde el 1 de febrero de 1990 hasta el 19 de enero de 2006.

La exposición al amianto

El empleado trabajó más de 24 años en AGNI, de los cuales 4 o 5 años tuvo una exposición directa con el amianto. Se jubiló a los 57 años, y en febrero de 2017 le diagnosticaron un carcinoma de pulmón. Falleció el 17 de diciembre de ese mismo año.

Los razonamientos jurídicos del magistrado de instancia “se encuentran apoyados en dos informes médicos”, ha explicado el Tribunal. “La empresa recurrente no ha logrado desvirtuar la conclusión del magistrado de instancia relativa a la fecha en la que el amianto desapareció de las instalaciones del centro de trabajo de Estella, que era donde trabajaba el esposo y padre de los demandantes, resultando acreditado que durante varios años el trabajador estuvo expuesto de forma continua a esa sustancia”, remarca.