La flor de Pascua es una de las protagonistas de la decoración navideña. Con sus características hojas de color rojo, se convierten en un adorno más en muchos de los hogares durante la época de Navidad. Aunque si tienes mascotas, es mejor evitarla.

Cuando se adquiere esta planta, está magnífica. Sus hojas rojas brillan de una manera espectacular, pero esto no dura mucho, ya que según pasan los días, las hojas se van apagando y cayendo. A veces, esta planta no llega a Nochebuena, y mucho menos a Nochevieja en un buen estado. Lo que sucede es que el mantenimiento supone un desafío para quien la compra, ya que es una planta muy delicada, pero para todo hay solución. Y en este caso, un jardinero de Tik Tok, Ángel Illescas, ha dado las claves para conservarla en perfecto estado.

Ángel Illescas, es un profesional que se dedica a cultivar este tipo de plantas, y en su cuenta de Tik Tok comparte sus trucos para que esta flor aguante lo máximo posible.

Al comprar la planta, hay que regar muy poco esta planta, sin que se llegue a encharcar. Sus recomendaciones son controlar el riego, debido a que la planta no necesita humedad. Lo necesario para este tipo de plantas es medio vaso cada tres o cuatro días. Además, el agua que sobra y que escurre en el plato, hay que retirarla para que la planta no se hidrate en exceso. En caso de que haya exceso de agua, la planta puede comenzar a perder hojas, aunque también puede perder hojas si se riega muy poco.

Si empiezan a caer las hojas, puede ser porque las raíces de la planta hayan cogido hongos, el consejo de este jardinero viral es que en el próximo riego, se añadan unas gotitas de agua oxigenada, de esta manera se podrán mantener a raya los hongos y así, que la planta se pueda ir recuperando.

Otro detalle importante, es que no se debe quitar la red de plástico, la causa es que los tallos de la flor de Pascua son muy frágiles, y pueden romperse. Dejando el plástico que traen se asegura de que no se rompan y que la planta no se estropee. La red se quita cuando la planta vaya a ser trasplantada.

Otro de los trucos que da es que hay que abonarla una vez por semana o cada quince días como mínimo. Esta planta necesita mucho abono, Ángel Illescas resalta que esta planta es muy “comilona”, por lo que necesita ser abonada regularmente. Él recomienda abonos líquidos, ya que son los ideales para estas plantas. En su etapa de floración, es muy recomendable mezclar el abono con el agua de riego cada quince días. De esta forma, crecerá más rápido y se mantendrá el color vibrante de sus hojas.

Por otro lado, el jardinero resalta que no hay que “marear” la planta, es decir, es mejor dejarla en un sitio fijo, donde pueda tener mucha luz natural. Por lo que, no es recomendable estar cambiándola continuamente de lugar. Además, hay que tener en cuenta que el sitio escogido para esta flor de Pascua, ha de ser un lugar donde esté protegida de las corrientes de aire y también de las fuentes de calor, como pueden ser radiadores o estufas. El lugar ideal es cerca de una ventana donde pueda recibir luz indirecta.

En cuanto a la temperatura ideal de estas plantas, son unas suaves, de unos 16 a 22 grados. Es importante que la planta no sufra cambios bruscos de temperatura y que no esté en ambientes demasiado secos. En caso de que la temperatura sea muy elevada, la planta puede comenzar a perder hojas.

Hay mucha gente que se pregunta si es necesario trasplantar la flor de Pascua, y la respuesta es no. Ya que, poniéndola en una maceta mayor, se va a conseguir que la planta tenga más humedad y eso no es lo que necesita. Si la planta aguanta hasta abril o mayo, entonces sí que sería un buen momento para trasplantarla.

La flor de Pascua requiere unos cuidados especiales dependiendo de cada estación, ya que cada una tiene sus propias características en cuanto a la temperatura, humedad y cuidados necesarios.

Cuando estamos en invierno, la planta va a necesitar mucha luz, un riego menos constante, y estar situada lejos de las corrientes de aire. Durante estos meses fríos llega el momento de la poda y de dejar que la planta repose.

Con la llegada de la primavera, también llega la época perfecta para trasplantar la flor de Pascua, o bien a una maceta más grande, o si se tiene la opción, a un jardín. Hay que asegurarse de que tiene sustrato y abono extra.

En los meses de verano, la planta necesita agua y debe estar protegida de los rayos directos del sol. Algo importante es mantener el sustrato ligeramente húmedo siempre.

En otoño llega el momento de preparar la planta para su floración, por lo que hay que asegurarse de que la flor de Pascua reciba las horas de luz necesarias y también, hay que aumentar la cantidad de agua y abono.

Evidentemente, hay que estar atento a cualquier problema que pueda surgir en la flor de Pascua para poder solucionarlo a tiempo. Por ejemplo, sus hojas se pueden poner amarillas, y eso significaría que hay un exceso de agua, también puede ser falta de nutrientes o que la planta ha sufrido algún cambio brusco en la temperatura.